Marc Murtra
Tras superar una junta de accionistas tensa, con muchos cambios y un considerable adelgazamiento del consejo de administración como resultado, el presidente de Indra, Marc Murtra, lo tiene todo en sus manos para afrontar la que probablemente sea la etapa más trascendente de la historia de la compañía. En un contexto geopolítico muy complicado, en mitad de una inesperada guerra en la vieja Europa y con un incremento global de los presupuestos de defensa, las posibilidades que se abren para una empresa puntera en el desarrollo de tecnología y sistemas que cada vez tienen más peso en esta industria son prácticamente infinitas. No se trata de una carrera convencional; los proyectos son tan costosos y ambiciosos que deben contar con el aval y apoyo de los diferentes gobiernos. En este sentido, Indra es la única empresa que en España puede representar este papel y para eso precisa del apoyo de la Administración. En esta línea ha trabajado Murtra en los últimos meses y, a partir de ahora, cuenta con todo ese apoyo y con las manos más libres para iniciar una nueva era en la que, además, cuenta con el viento de cola del buen desempeño de Indra en los últimos años, que ha llevado sin ir más lejos a la cotizada a recuperar un dividendo que no veía desde hace ocho años.