La pandemia de coronavirus ha dejado al descubierto la crudeza de las carencias por la falta de inversión y los recortes impuestos por la Generalitat de Cataluña sobre un sector esencial como la Sanidad a lo largo de la última década. Así se ha llegado al punto que sus profesionales se planteen llegar a la huelga si el Govern no se compromete de una vez por todas a arreglar sus problemas en los próximos meses.

Entre las exigencias de los galenos al conseller Josep Maria Argimon figuran ampliar el personal con más contrataciones, y una larga lista de demandas para mejorar el sistema asistencial y las condiciones laborales. Algo que debería pasar por un mayor más presupuesto. Recursos económicos hay, se trata de gestionarlos mejor y dedicarlos a lo importante, en vez de a las habituales veleidades de los sucesivos gobiernos nacionalistas catalanes.