Fluidra ha anunciado en las últimas horas la compra de la estadounidense Taylor, lo que supone su quinta adquisición del año que está a punto de cumplirse. Lo mejor para una empresa, y más en el caso de una cotizada, no es disponer de un plan ambicioso, sino cumplirlo y, además, con creces. Y ese es el caso de la compañía con sede en Sabadell.
A comienzos del ejercicio, su presidente, Eloi Planes, dibujaba un panorama esplendoroso para la compañía en 2021, con previsiones de crecimiento en el resultado operativo por encima del 30% e inversiones destinadas a cerrar entre cinco y seis operaciones durante el ejercicio con el objetivo de seguir creciendo. Especialmente en EEUU, el mercado de referencia en el sector de las piscinas.
Dicho y hecho, Fluidra ha completado ya cinco compras, cuatro de ellas en territorio norteamericano, y ha hecho que las estimaciones de inicios de año se hayan quedado más que cortas, con hasta dos revisiones al alza de objetivos para el cierre de 2021. Y todo ello con un apalancamiento financiero moderado, reflejado en un ratio deuda/Ebitda inferior a dos veces. Cifras y compromisos cumplidos que explican por qué Fluidra es uno de los valores con mejor comportamiento del Ibex 35, el selectivo en el que está plácidamente instalado el valor gracias a avales como los citados.