Marta Vilalta parece ahora convencida de la necesidad de ampliar el aeropuerto de El Prat, y desea y espera que esta renovación afecte lo menos posible al medio ambiente, en una clara apuesta por compaginar el progreso y el futuro del planeta.

Sin embargo, tiene que meter siempre la cuña nacionalista, y cargar contra el Gobierno incluso con motivo de una inversión tan relevante como esta.