Los catalanes parecen destinados a seguir sufriendo al incalificable Quim Torra incluso después de ser despojado de su cargo de presidente de la Generalitat por desobediencia. Los últimos damnificados han sido los Amics del Museu d'Art de Girona, que han sido desalojados de las instalaciones que ocupaban desde hace años en el centro de la capital gerundense para ubicar allí la oficina del expresident. Seis meses después de ser expulsada de la Casa Solterra --un palacete medieval--, la asociación cultural apenas cuenta con una pequeña oficina para tareas administrativas, pero se han quedado sin un espacio para exposiciones y conferencias, que es su actividad principal.
Quim Torra
19 junio, 2021 00:00Addoor Sticky
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