Antonio Garamendi, presidente de la CEOE / EP
Antonio Garamendi
Antonio Garamendi ha metido la pata hasta el fondo. "Igual a un catalán no le gusta, pero este vasco dijo no a dos decretos sobre los ERTE", señaló el presidente de la CEOE este martes para defenderse de las críticas recibidas por el acuerdo alcanzado con el Gobierno que alarga los despidos temporales por fuerza mayor hasta el 30 de junio.
Azuzar el conflicto territorial entre CCAA con el objetivo de tapar su incapacidad para llegar a un pacto beneficioso para empresas y trabajadores no es de recibo. El líder de la gran patronal española debería aprender a asumir su errores sin crear cortinas de humo con temas tan inflamables como este.
