Lluís Llach
La irrupción de Lluís Llach en la política activa ha dejado muy tocada la imagen que se había labrado tras una larga y exitosa trayectoria musical. El otrora admirado cantautor ha pasado a ser una figura extravagante de un procés que agoniza, un miembro más de un star system repleto de personajes frikis y grotescos. La triste fotografía del salón de la Casa de la República de Waterloo con Puigdemont, Comín, Paluzie, Castellà y Llach siguiendo el juicio a Torra no puede ser más elocuente de esa situación.