Requerida sobre la integración de los perros guía en la ciudad, la teniente de alcalde Laia Ortiz, responsable del área de derechos sociales del Ayuntamiento de Barcelona, no ha estado a la altura de las circunstancias. Su respuesta tibia a las reivindicaciones de la Asociación de Perros Guía de Cataluña, que reclaman normalidad en los accesos de estos “lazarillos” en comercios y transporte público, ha sido muy tibia. El Consistorio debe dar ejemplo si quieren evitar incidentes en la convivencia ciudadana.