Los intentos del Gobierno independentista de Carles Puigdemont por controlar la justicia han chocado con jueces y funcionarios

La Generalitat pretende enviar "evaluadores" para "supervisar" el funcionamiento de los tribunales, pero los magistrados del TSJC --con Jesús María Barrientos al frente-- y los empleados públicos se niegan a aceptar lo que consideran "comisarios políticos". Todo ello con la sombra del procés muy presente.