Susana Díaz y los visitantes
Las primarias andaluzas del PSOE han empezado con la secretaria general, Susana Díaz, lanzándose contra Juan Espadas, el candidato que defiende el liderazgo de Pedro Sánchez en el partido. Una pugna como la de David contra Goliat. Díaz ha planteado estas primarias como una lucha frente al aparato, cuestión curiosa si se tiene en cuenta de que ella lleva en el aparato socialista desde que tenía 20 años.
Dos detalles delatan a la actual secretaria del PSOE andaluz. Dice que se patea las agrupaciones, pero no lo hace en su coche particular sino en el del partido. Y la segunda, ocurrida esta mañana en la sede de San Vicente, el Ferraz socialista andaluz. Allí se han citado los representantes de los tres candidatos --además de Díaz y Espadas se presenta Luis Angel Hierro, que para muchos es un tapado de la expresidenta para arrebatar votos al apoyado por Moncloa-- para dilucidar las condiciones y el sitio del debate público que mantendrán. La gente de Espadas han recibido una tarjeta de visitante en la entrada de la sede, a pesar de que algunos de ellos forman parte de la ejecutiva del partido andaluz. Los de la expresidenta han sido recibidos con todos los honores y no se les ha identificado. Una batalla de aparatos en toda regla.
Las primarias se celebrarán el 13 de junio y el ganador será el candidato socialista a la Junta. Sin embargo, desde el susanismo se filtra que si la líder no baja del 40% de los apoyos no dejará la secretaria general, el escenario perfecto para un tropezón del PSOE para preparar unos comicios que se da por sentados que Juan Moreno Bonilla (PP) adelantará. Se plantea como una estratagema par que Susana Díaz pueda enarbolar la bandera de que es la única capaz de propiciar que el socialismo recupere la Junta y barrer a los apoyos del presidente del Gobierno en la comunidad.
Por ahora, las encuestas dejan claro de que el PP sacará rédito a un primer mandato tranquilo mientras el PSOE, que queda en segunda posición, prosigue en su batalla cainita.