Los 'indepes', a punto de dar el sí a Sánchez
Que la marcha de Quim Torra de la Generalitat ha abierto un nuevo espacio es algo que ni los suyos discuten. De hecho, excepto por algún tuit o alguna salida de tono, Joaquim Torra ha desaparecido en la papelera de la historia. Su “sucesor designado”, Pere Aragonés, está dando un nuevo toque a un gobierno que está lleno de trampas, codazos e inquinas internas, lo que evidencia su fragilidad ante unas elecciones que con la pandemia también están en el aire.
El gobierno catalán pidió el viernes el estado de alarma, tras una conversación de Aragonés con Urkullu, y los republicanos están dispuestos a negociar “mejoras” en el texto del Ejecutivo de Pedro Sánchez. La principal salvedad, la duración del estado de alarma. Para los republicanos es “abusivo” que el decreto esté vigente seis meses, pero están dispuestos a negociar con Sánchez para consolidar las competencias del gobierno autonómico y reducir esta temporalidad. La actitud no es negativa y en ERC están convencidos que encontrar un punto de encuentro es posible.
Quien por vía de las redes sociales ha anunciado que votará a favor del Real Decreto es el PDECat, que cuenta con cuatro diputados en Madrid. Los herederos de Convergència apoyarán a Sánchez mientras cargan contra los republicanos del Govern, sobre todo, contra la consellera de Salud, Alba Vergès, a la que señalan como responsable del cierre de bares y restaurantes.
En la otra orilla están los otros cuatro diputados de Junts per Catalunya (JxCat) que critican abiertamente el Real Decreto, pero que esperarán a tomar una decisión en función de sus conversaciones “con otras fuerzas independentistas”. JxCat centra sus críticas en la temporalidad y la falta de competencias del Govern. Aun así, no quiere dejar de ser importante en Madrid y no se quedará en soledad votando con Vox.