Patinazo de Puigneró con el lazo amarillo
Nuevo patinazo de un dirigente de la Generalitat con las fake news. Esta vez, el responsable de difundir un falso bulo ha sido nada menos que el consejero de Políticas Digitales, Jordi Puigneró, a cuenta de la visita del rey Felipe VI a Barcelona con motivo de la entrega de los premios Princesa de Gerona.
Puigneró publicó en su perfil de Twitter --donde cuenta con 21.500 seguidores-- que la Casa Real había borrado con Photoshop el lazo amarillo de apoyo a los políticos presos independependentistas que el matemático Xavi Ros lució en su solapa en el momento de recoger el premio con el que había sido distinguido.
El político postconvergente dio por hecho que las imágenes que la Casa Real publicó de Ros, en las que aparecía sin el lazo tras recoger su galardón, estaban manipuladas: "Photoshop Real. Para que luego nos digan que en España no hay censura ni presos políticos", fue el polémico mensaje de Puigneró.
He escoltat en @ros_xavi confirmant que després de l'entrega de premis es va treure el llaç groc. Per tant, rectifico -i elimino- la piulada d'aquest matí. Li vull agrair però la seva valentia per denunciar que Espanya té #presospolítics i felicitar-lo per una carrera brillant pic.twitter.com/NrcB8Senfr
— Jordi Pu1gnerO (@jordiPuignero) 5 de noviembre de 2019
Sin embargo, el alto cargo de la Generalitat no tuvo más remedio que eliminar su post después de que el propio Ros reconociera que se quitó el lazo amarillo tras la entrega. "Por tanto, rectifico --y elimino-- el mensaje de esta mañana. Le quiero agradecer sin embargo su valentía para denunciar que España tiene presos políticos y felicitarlo por una carrera brillante".
Pero el daño ya estaba hecho, porque la fake new de Puigneró, como suele ser habitual, fue difundida urbi et orbe hasta la saciedad por numerosos políticos y otros gurús nacionalistas, como el empresario Toni Soler, productor de numerosos programas de TV3. Un hecho doblemente grave si se tiene en cuenta que, por su cargo como supuesto experto tecnológico --por el que percibe más de 115.000 euros anuales--, Puigneró debería ser más avezado en este tipo de cuestiones.