La infantilización y banalización del procés ha alcanzado cuotas inéditas. Los principales independentistas no se cortan a la hora de justificar o quitar importancia a la violencia desatada en las últimas semanas por parte de sus bases contra la policía. Presentan los disturbios como si se tratase de un juego de niños, a pesar de que los heridos --entre agentes y atacantes-- se cuentan por cientos.
La última en sumarse a esta deriva de enajenación generalizada ha sido la dibujante Pilarín Bayés. La activista independentista --ocupó el penúltimo lugar de la lista de JxCat por Barcelona en las elecciones del 21D para mostrar su apoyo al prófugo Carles Puigdemont, y repitió el 28A-- ha difundido en las redes sociales una ilustración en la que aparecen dos niños encapuchados --uno de ellos, embozado-- portando esteladas junto a un mensaje en el que anima a los jóvenes que se están manifestando estos días contra la sentencia del procés.
"Chicos, chicas, jóvenes que estos días estáis haciendo resistencia pacífica y desobediencia civil, me representáis. Entre todos hemos de darle la vuelta a esta gravísima injusticia. Libertad presos políticos, libertad exiliados, freedom for Catalonia. Pacíficamente pero con determinación, salgamos a las calles", señala en un mensaje que acompaña al dibujo.
Al final, el procés se ha convertido en una suerte de república de l'esplai.