Iceta y el Ministerio de Cultura
El “no es no” ha hecho fortuna en el PSOE después de que Pedro Sánchez pronunciara la frase para no investir a Mariano Rajoy. Miquel Iceta tiró del “no es no” para negarse ante su secretario general en dos ocasiones. La primera, junio de 2018. Sánchez estaba formando su primer Gobierno y quería contar con Iceta. Le pidió que entrara como ministro de Cultura. Iceta rechazó la idea porque ser ministro “implica dedicación y gestión y te deja poco tiempo para hacer política. Y el máximo líder del PSC tiene que hacer política en estos tiempos convulsos”, según comentó en su círculo más cercano.
Ahora Sánchez lo volvió a intentar. Llamó a Iceta hace unos días y le volvió a ofrecer un ministerio “esta vez con más enjundia”, dicen los que saben de las conversaciones entre bambalinas. Iceta volvió a decir que no. El martes de esta semana, Sánchez lo volvió a intentar. Descolgó el teléfono entre reunión y reunión --ese día recibió a Albert Rivera y a Pablo Iglesias-- volvió a llamar a Iceta. Esta vez le ofreció la presidencia del Senado. A la tercera, Iceta dejó de lado el “no es no” y aceptó el envite, aunque seguirá como primer secretario del PSC para pilotar el cambio de mandos que se hará bajo su supervisión.