El PP utiliza la vieja política del palo y la zanahoria en sus relaciones con Ciudadanos. En los días previos a la reunión de las dos delegaciones, transcurridos tres meses efectivos --con actividad parlamentaria-- desde la puesta en marcha de su acuerdo de investidura, el PP ha zarandeado y menospreciado a los naranjas.
El cuento pareció cambiar ayer tras la reunión de ambas delegaciones, encabezadas por Juan Carlos Girauta y Rafael Hernando, quienes al acabar su encuentro discutían cordialmente sobre la figura de Manuel Azaña. Y en las respectivas ruedas de prensa, cordialidad. Los dos partidos destacaron que "todo está encarrilado", aunque pocas concreciones se hicieron públicas. Desde Ciudadanos se preguntaban si "es que ahora hay dos PP" porque escondían una zanahoria en la manga: el lunes se registrará en el Congreso una comisión de investigación sobre el PP, presentada por los dos partidos al alimón.