¿La estrategia de Colau se revuelve contra sus votantes?
Varios empresarios con inversiones en curso previstas en la ciudad de Barcelona. Otros, incluso han comunicado al ayuntamiento de la capital catalana que estudian qué harán con los proyectos. En voz baja, como corresponde a tema de tal sensibilidad, aseguran que las medidas adoptadas por la alcaldesa Ada Colau en sus primeras semanas de mandato convierten a la Ciudad Condal en un espacio de inseguridad jurídica y escasa proyección económica futura.
“Son puestos de trabajo que Barcelona perderá a favor de otras localizaciones –esgrimen--. ¿Acaso va contra sus supuestos electores tomando decisiones que ponen en riesgo la inversión empresarial?”. Son comentarios que se extienden alrededor de la gestión municipal de Barcelona en Comú.
A los potenciales inversores, pero sobre todo al mundo económico de la ciudad, preocupa que se haya cortocircuitado la interlocución con los gestores municipales por meros motivos ideológicos. Mientras, otras ciudades del entorno –más cuanto más limítrofes– se han puesto manos a la obra para intentar atraer inversiones empresariales en un inicio destinadas a Barcelona.