Lautaro Martínez contra Haaland: ¿Qué fichaje interesa más al Barça?

En estos momentos, una de las posiciones que más preocupan al Barça de cara al curso que viene es la de un 9 goleador. A Luis Suárez, con 33 años, cada vez le queda menos fútbol en sus botas. Su retirada está cada vez más cerca. Y pese a que este curso ha demostrado tener el olfato goleador intacto en la primera parte de la temporada, también ha manifestado importantes carencias físicas, coronadas por una operación en su rodilla que lo dejó más de cuatro meses lejos de los terrenos de juego. 

Ya son muchos veranos consecutivos en que el conjunto culé ha intentado encontrar al heredero del charrúa para la delantera. Pero este sí podría ser el definitivo. Localizar a un nuevo socio para Messi es clave para asegurar el futuro deportivo, y la urgencia cada vez acecha más. 

Luis Suárez celebra un gol con el Barça / EFE

Luis Suárez celebra un gol con el Barça / EFE

En este sentido, la secretaría técnica azulgrana cuenta con una larga lista de atacantes para reforzar al equipo el curso que viene. El gran favorito es el ariete del Inter de Milán, Lautaro Martínez. Las negociaciones con el jugador están cada vez más encarriladas, y las posiciones entre ambos clubes también parecen destinadas a encontrarse.

No obstante, traerle al Camp Nou no será fácil y comportará un coste importante. Las últimas informaciones apuntan a un trueque donde el club azulgrana tendría incluir a gran parte de su plantilla. En caso de que la operación finalmente se rompa, también se tienen en cuenta alternativas más asequibles. Aunque, después de Lautaro, el gran favorito de la secretaría técnica para liderar la ofensiva culé durante la próxima década sería Erling Haaland. Dos delanteros con estilos totalmente opuestos. 

Lautaro vs Haaland

Una de las pocas cosas que comparten Lautaro Martínez y Erling Haaland es su indudable olfato goleador. 16 goles del primero y 41 del segundo les avalan este curso. No obstante, el perfil de delantero y la forma de superar las porterías rivales son totalmente distintas. El argentino es mucho más completo: especialista en aguantar el balón de espaldas a portería, también ha mostrado interesantes dotes en el juego combinativo, y tiene esa intuición de los grandes arietes para ir al espacio en el momento preciso. 

En cambio, el noruego sabe hacer menos cosas, pero posiblemente lo que hace, lo hace mejor. Su gran virtud es la potencia y la definición. Es un arma letal cuando juega con espacios y al contraataque. Y de cara a portería, pocas veces falla. Su porcentaje de acierto es altísimo. Es un 9 mucho más tradicional. Menos completo, pero que te asegura una cantidad enorme de goles por temporada, y un peligro constante para la defensa rival. Además, físicamente es mucho más robusto, gracias a su 1,94 de altura. En cambio, Lautaro tiene esa magia de los bajitos (1,74m). 

A favor de los dos juega su edad. Tienen tiempo para dominar el fútbol mundial durante la próxima década. El del Inter cumplirá en agosto 23 años, mientras que el del Borussia hará 20 en julio. Lo que les da todavía mucho margen de maniobra para seguir potenciando sus cualidades, y aprender nuevas aptitudes para ser todavía mejores. 

A grandes rasgos, las condiciones de Lautaro Martínez apuntan a óptimas para adaptarse por completo al estilo de juego del Barça. Además, su afinidad con Messi, demostrada en los partidos de la albiceleste, es un punto muy a favor.

Estilo Barça

En cambio, Haaland podría mostrar más carencias en ese sentido. Además, las negociaciones con el agente del jugador del Borussia, Mino Raiola, no suelen caracterizarse por ser beneficiosas para el club azulgrana. Sin embargo, sus 19 años y los números de récord de este curso lo convierten en un futbolista por el que vale la pena arriesgarse. Un argumento que también piensa el Real Madrid, entre otros. Y es que su fichaje se convertirá en una auténtica guerra.

El FC Barcelona solo tendrá presupuesto para una gran inversión este verano. Todos los números apuntan a Lautaro. No obstante, el noruego sigue demostrando que merece ser el centro de atención de todas las superpotencias europeas. Incluso en el Camp Nou.