Joan Laporta, presidente del Barça, asegura que la recuperación económica del club ya es una realidad. Este domingo, en la asamblea de socios compromisarios, el máximo dirigente presentará los números del ejercicio anterior (17 millones de pérdidas) y el presupuesto del actual ejercicio.
La asamblea, una vez más, será telemática. El actual formato evita tensiones y discusiones subidas de tono. Laporta presumirá del incremento de los ingresos del club en los últimos años. Los patrocinios han subido. También hay buenas noticias del departamento de merchandising. Y está claro que el peso de la masa salarial disminuye.
Asuntos delicados
Laporta, no obstante, deberá ser muy convincentes en otros asuntos delicados. Por ejemplo, en la reforma del Camp Nou, tras conocerse que la propuesta de Limak era la peor valorada por los técnicos del club para realizar la transformación del estadio. Las obras, de momento, ya acumulan un año de retraso, o casi, y la constructora turca prometió mucha más celeridad.
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La gestión de Barça Studios también penaliza a Laporta, igual que el pago de comisiones a personas afines. Hoy, el club está en manos del equipo, que la pasada temporada ganó la Liga, la Copa del Rey y la Supercopa.
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