Hansi Flick le quita trabajo a Deco. El alemán conoce la compleja situación económica del Barça y no da problemas. Seguramente estaría encantado de recibir refuerzos pero, si no se puede, se las apaña. El talento formado en la Masía está nutriendo su plantilla. Ya el verano pasado frenó la incorporación de un pivote porque tenía a Bernal y a Casadó. Ahora, al comienzo de la pretemporada, tiene a diez canteranos, provenientes del juvenil y del filial, entrenando con sus pupilos.
En la preparación veraniega pasada, también llamó a varios chicos formados en las entrañas de la academia culé para que participasen en dinámica del primer equipo. Algunos, además, se ganaron un billete para acudir a la gira por EEUU. No obstante, en el presente estío, aunque algunos repiten, son otros nombres los que se han colado entre los mayores. Ellos son Landry Farré, Jofre Torrents, Pedro Fernández, Juan Hernández, Guille Fernández, Toni Fernández, Roony Bardghji, Ibrahim Diarra, Jan Virgili y Dani Rodríguez.
Dos defensas
Para reforzar la retaguardia, Landry Farré (2007) y Jofre Torrents (2007) han sido los seleccionados por Flick. El primero es, de formación, lateral derecho. El segundo es su homólogo, aunque en la banda izquierda. Se trata de dos futbolistas de 18 años, en edad de juvenil, que pasaron la anterior campaña con el Barça B. El diestro es una auténtica bestia física, además de que destaca por su polivalencia, pues puede jugar en todos los puestos de la zaga. Es un futbolista muy completo, pues posee conceptos ofensivos y defensivos. Su potencia, unida con su insistencia y sus cualidades deportivas lo hacen muy interesante.
Landry Farré, durante los entrenamientos del primer equipo del Barça
En la otra banda está ubicado el Maradona del filial, según su excompañero Aleix Garrido. Es un zaguero con grandes capacidades asociativas. Muy inteligente con balón y un puñal a la hora de lanzarse al ataque. Además, mide 1'85 metros de altura y es muy potente. Estuvo un año parado, entre 2023 y 2024, por una rotura de ligamentos cruzados. Sin embargo, está evolucionando correctamente. Está llamado a alcanzar el primer equipo.
Aleix Garrido y Jofre Torrents festejan un gol del Barça B contra la Cultural Leonesa
Calidad en la medular
Guille Fernández es un futbolista de largo recorrido. Tiene 17 años y todavía no está claro qué tipo de mediocentro será. No obstante, puede jugar en el doble pivote, de interior o de mediapunta. Potente, inteligente y con trabajo en ambas áreas. Por otra parte, Pedro Dro Fernández, de la misma edad, se caracteriza por ser elegante y por tener buen criterio con el balón. Le falta físico, pero es algo lógico por la edad y su composición.
La tristeza de Guille Fernández tras certificar el descenso del Barça B a Segunda RFEF
Pedro 'Dro' Fernández, juvenil que entrena con el primer equipo del Barça
Ibrahim Diarra (2006) y Juan Hernández (2007), son dos futbolistas con más vocación ofensiva. Ambos son mediapuntas, aunque pueden jugar en las bandas, principalmente en la contraria de sus pies naturales. El primero es zurdo y el segundo diestro. El maliense tiene mucho futuro, pero no consiguió hacerse con el puesto titular en el Juvenil A. El nacido en Teruel era el dueño de la mencionada plaza. Es rápido, ágil, técnico y tiene gol.
Ibrahim Diarra debuta con el Juvenil A del Barça
Dani Olmo, junto a Juan Hernández, que entrena con el primer equipo del Barça
Fútbol ofensivo
En la sección de atacantes está Toni Fernández, un fetiche de Flick. Tiene 17 años recién cumplidos. Es fino y estético. Posee una cintura ágil y tiene buen regate en corto, además de un importante desparpajo. Es zurdo y juega en la banda derecha, aunque puede ser un mediapunta o interior ofensivo. Roony Bardghji (2005), recién llegado, es similar, pero es más natural de banda. El sueco dribla de maravilla y atesora un potente golpeo seco con su pierna izquierda.
Toni Fernández, en su debut oficial con el primer equipo del Barça
Roony Bardghji, nuevo jugador del FC Barcelona
También zurdo, aunque puede jugar en sendos costados, es Dani Rodríguez (2005). Entrena en el gimnasio tras dislocarse el hombro en mayo ante el Real Valladolid. Es un diablo. Eléctrico, experto en el regate y decisivo en los momentos importantes con el filial. El último es Jan Virgili (2006), otro rompecabezas para los laterales. Es diestro y juega a banda cambiada. Los quiebros son su firma personal y gusta mucho a Hansi Flick. Desparpajo en estado puro, vital para el Juvenil A y participó con el filial. Ahora, claro, le tocará al alemán escoger, pues solo irán 26 convocados a la gira, a pesar de que son 36 los que entrenan en la Ciutat Esportiva Joan Gamper.
Dani Rodríguez se retira del José Zorrilla con el brazo en cabestrillo
Jan Virgili encara al portero para marcar el primero de sus dos goles en Lugo