
MVP: Tomas Satoransky CULEMANÍA
MVP: Tomas Satoransky
El director de juego checo no puedo evitar la eliminación del Barça de basket en los cuartos de final de la Copa del Rey, a pesar de anotar 17 puntos
Más información: Scariolo asiste en directo al desastre del Barça de basket en la Copa: Peñarroya, al borde del despido
Noticias relacionadas
- Scariolo asiste en directo al desastre del Barça de basket en la Copa: Peñarroya, al borde del despido
- Movida en el banquillo del Barça de basket: dos jugadores casi llegan a las manos
- Fichaje extraviado en el Barça de basket: Peñarroya se queda sin un pívot de la NBA que jugará la Euroliga
- La grave lesión en el Barça de basket que descoloca a Navarro: fichaje urgente
Los 17 puntos de Tomas Satoransky no fueron suficientes. El Barça de basket llegó de milagro a la Copa y se fue a la primera de cambio. El equipo de Joan Peñarroya se enfrentó a La Laguna Tenerife (91-86) y cayó de manera inexplicable a partir del tercer cuarto, cuando tenía una cómoda ventaja.
Pasada la media parte, Kevin Punter sufrió una lesión en el hombro izquierdo. No regresó al partido y Sato asumió galones. El base checo es un tipo experimentado, con currículo en la NBA, pero no atrevido. Sin embargo, se destapó como la gran amenaza del Barça en ataque.

Satoransky bota el balón en los cuartos de final de la Copa contra Tenerife FCB
El director de juego acabó el partido jugando casi 29 minutos. El cansancio no le pasó factura. Consiguió sus 17 puntos con un 4/5 en tiros de dos y un 3/7 desde la línea de tres. Es decir, con porcentajes del 80% y el 43%, respectivamente. Alguien tenía que dar la cara y Satoransky fue el único que lo hizo.
El exterior del Barça tuvo que suplir en ataque a Abrines, que solo acabó con 5 puntos, a Brizuela, que terminó con 7, y a Hernangómez, que metió dos canastas. La temporada de Satoransky no es buena.
No está tirando bien ni siendo la referencia que se esperaba cuando regresó al Palau Blaugrana. Más aún teniendo en cuenta su salario. Pero contra La Laguna Tenerife fue lo único salvable del Barça. Dio la cara.