Peñarroya pierde los papeles y el Barça naufraga en la Euroliga con dos grandes señalados

El Barça de basket lo intentó, pero no suficiente. Los pupilos de Joan Peñarroya no fueron capaces de defender el Palau ante el Olympiacos (88-90), donde el abrumador dominio ofensivo de Sasha Vezenkov (24 puntos) hizo sufrir mucho a la defensa azulgrana. Kevin Punter (20 puntos) volvió a tirar del carro en los tramos decisivos, pero Evan Fournier se encargó de sentenciar la victoria de los griegos con una canasta en los segundos finales.

El hecho de quedarse tan cerca de la victoria contra el líder de la Euroliga provocó que Peñarroya perdiera los papeles. Muchos gritos y quejas al cuerpo arbitral por varias decisiones polémicas en el último cuarto. También estuvo al borde del ataque de nervios por la pésima actuación de Youssoupha Fall y Juan Núñez. Dos posiciones --pívot y base-- que demuestran la gigantesca necesidad de una reacción de Juan Carlos Navarro en el mercado de fichajes.

Intercambio de golpes

Desde el primer minuto de partido empezó a generar problemas Sasha Vezenkov. Fue el principal líder de un Olympiacos que movió con más velocidad el balón en la mayoría de las acciones ofensivas. Los culés resistieron con personalidad a partir de la influencia de Jabari Parker y Kevin Punter.

Los dos jugadores norteamericanos también recibieron el apoyo de Chimezie Metu y Justin Anderson. Cada uno aportó en el momento preciso para que el elenco catalán consiguiera liderar el marcador en el descanso (47-45). Fue un partido de intercambio de golpes entre los dos equipos, donde el Barça de basket logró acertar más ataques para animar el Palau.

Vezenkov, incontrolable

Dos triples de Jabari Parker ampliaron la ventaja del Barça hasta 8 puntos. Parecía que era el punto de inflexión, pero el Olympiacos respondió con un parcial de 0-10 para dar la vuelta al marcador. Solamente el triple de Anderson despertó a los suyos de un tercer cuarto que se complicaba por la tremenda inspiración ofensiva de Sasha Vezenkov.

La reacción de Kevin Punter durante el partido del Barça contra el Olympiacos EFE

El más señalado en esos minutos negativos fue Juan Núñez. No solo por un grave error en la distribución de juego, sino también por la poca competitividad defensiva contra Evan Fournier. El dominio exterior del Olympiacos fue lo que provocó que la balanza se inclinó peligrosamente antes de llegar al último cuarto (65-66). 

El cabreo de Peñarroya

Metu, que fue el mejor del Barça en varios tramos del partido, sufrió en defensa al cometer una falta antideportiva que permitió a Olympiacos alcanzar la máxima del partido con ocho puntos. El último cuarto fue un dolor de cabeza por el incontrolable Williams-Goss, además de los problemas de los culés para defender el rebote.

Satoransky lidera una jugada del Barça de basket contra el Olympiacos EFE

La desesperación de Peñarroya fue cada vez más grande. El arbitraje decidió un par de jugadas --falta ofensiva de Fall y defensiva de Brizuela-- que ayudaron al conjunto griego a mantener su ventaja sobre el Barça de basket. Esto supuso un enorme cabreo para el entrenador azulgrana y a los aficionados que asistieron al Palau.

Tanto para nada

El triple de Brizuela dio vida al Barça de basket a falta de dos minutos de partido. Solo dos puntos separaron a ambos equipos en el marcador. El Olympiacos empezó a sentir la presión del Palau y cometieron muchos errores de precipitación, lo que fue aprovechado por un Punter en estado de gracia.

Joan Peñarroya se lleva las manos a la cabeza en la derrota contra el Olympiacos EFE

Los tiros libres de Punter empataron el partido, pero la última posesión fue para Olympiacos. Los azulgranas intentaron defender lo máximo posible esa jugada y forzar la prórroga. Sin embargo, Fournier se encargó de liquidar el partido con una canasta justo cuando terminó el compromiso. Balde de agua fría para un Barça de basket que sigue sin tener regularidad.