Willy Hernangómez fue el fichaje estrella del Barça de basket en verano de 2023. Debía ser el nuevo líder de un equipo que, de un plumazo, se había quedado sin Nikola Mirotic, Cory Higgins y Sarunas Jasikevicius. Sin embargo, el pívot madrileño nunca ha sido un jugador rentable.
El Barça pagó un precio muy alto por Willy para que el Real Madrid no igualara la oferta, pues tenía sus derechos en España. El club azulgrana ofertó tres años de contrato y 12,5 millones de euros por un pívot con mucho talento y menos sacrificio. Es el jugador que más cobra, pero no es el más decisivo.
Tensiones con Grimau
La pasada temporada, Willy chocó con Roger Grimau. Su talante altivo y pasota fue una pesadilla para el técnico barcelonista. Poco intenso en defensa, fue más problema que solución. Al final, las tensiones entre los dos estallaron, cuando el jugador le dijo a su entrenador que no le gritara porque le quedaban "dos telediarios".
Willy Hernangómez y Font pugnan por el balón
Joan Peñarroya, técnico actual del Barça, tampoco ha logrado motivar a Willy. En Belgrado no jugó ni un minuto contra el Partizán. En el anterior partido de la Euroliga, contra el Baskonia, ni tan siquiera fue convocado. Antes, contra Olympiacos, anotó 11 puntos en 14 minutos.
Euroliga y ACB
En la Liga ACB, Willy sumó 11 puntos en 19 minutos contra La Coruña y siete puntos en 17 minutos en la sorprendente derrota del Barça en la pista del Breogán. Últimamente, el pívot internacional tiene más protagonismo en la Liga ACB --aunque no fue convocado ante Unicaja-- que en la Euroliga, una decisión que penaliza a un club con problemas económicos que necesita la máxima aportación de sus estrellas.