Joan Peñarroya afronta el gran reto de dirigir al Barça con la máxima ilusión y ambición. Sabe que no lo tendrá fácil. A la espera de poder cerrar tres fichajes, el técnico de Terrassa sabe que deberá gestionar muchos egos en el Palau Blaugrana. Y, sobre todo, tendrá la difícil misión de motivar a Willy Hernangómez.
Willy fue el fichaje estrella del Barça hace un año. El elegido para relevar a Nikola Mirotic, pero sus prestaciones quedaron muy lejos de las esperadas. Roger Grimau, entonces entrenador, acabó desesperado por su escasa implicación en defensa.
Las cifras de Willy
El pívot madrileño, de 30 años, aportó muchas soluciones en ataque. Es un pívot con buenos movimientos en la pintura y buena mano. En su primera temporada en el Barça, Hernangómez promedió 11 puntos y 4,8 rebotes en la Liga ACB y 12,2 puntos y 6,2 rebotes en la Euroliga.
Peñarroya, consciente de las virtudes y las carencias de Willy, espera encontrar la fórmula para motivarlo. Para transmitir que debe asumir responsabilidades. El papel de líder quedará reservado para Kevin Punter, mientras que el pívot debe ser la gran referencia del Barça bajo los aros.
La postura del técnico
"Willy tendrá el papel que se gane, como todos sus compañeros. Es un jugador bastante importante, por el que el club hizo una gran inversión. Le ayudará que sea su segunda temporada en el club, después de muchos años en la NBA, con una situación muy diferente con la que se ha encontrado en su vuelta al baloncesto europeo", manifestó el lunes Peñarroya durante su presentación oficial.
El nuevo entrenador del Barça añadió: "Está claro que es uno de los jugadores que todos esperamos que den un paso al frente, ya que será algo bueno para nuestro equipo, pero no solo él, también otros compañeros".
El Barça confía también en cerrar pronto el fichaje de un ala-pívot de perfil defensivo y muy atlético para ayudar a Willy Hernangómez, un jugador con mucha experiencia en la NBA que debería ser más importante en el Palau.