El Barça de basket también inicia una nueva era. Juan Carlos Navarro no ha fichado a un entrenador de prestigio como Hansi Flick. Ha apostado por un técnico de perfil medio que vivió sus mejores días en el Burgos. Es Joan Peñarroya, mucha más económico que Xavi Pascual, el gran deseado por Joan Laporta.
Navarro sabe que se la juega como manager general de la sección de baloncesto. Hace un año liquidó a Sarunas Jasikevicius y apostó por Roger Grimau, sin experiencia alguna en la élite. El club fichó a Joel Parra, Darío Brizuela, Willy Hernangómez y Jabari Parker, pero terminó la temporada sin un título. Y con malas sensaciones.
Peñarroya ya manda
Grimau, un técnico que apuesta por un baloncesto muy ofensivo pero con poco carácter, fue el gran damnificado de la crisis del Barça de basket. Y Navarro y el directivo responsable del basket, Josep Cubells, activaron la operación entrenador.
Navarro se ha decantado finalmente por Peñarroya, exentrenador de Andorra, Manresa, Burgos, Valencia y Baskonia. Su currículo es muy discreto, pero se adapta a la realidad económica del Barça.
Las salidas
La mayor inversión se destinará al fichaje de dos o tres jugadores de nivel. Oriol Paulí y Nikola Kalinic no seguirán en el club, mientras que Rokas Jokubaitis podría dar el salto a la NBA. El Barça, mientras, está a la espera de Ricky Rubio, recuperado de sus problemas de salud mental pero que no ha terminado satisfecho por su rendimiento en la pista.
El Barça, según algunas informaciones, tiene un acuerdo verbal para fichar a dos jugadores del Ulm alemán: Juan Núñez, formado en la cantera del Real Madrid, y Trevion Williams, un pívot muy intenso en defensa y atlético.
Punter, al caer
Navarro, no obstante, podría cerrar antes el fichaje de Kevin Punter, alero norteamericano que juega en el Partizán. Hace un año, el Barça ya tenía pactado su fichaje, pero el jugador optó por renovar su contrato con el equipo serbio. Ahora vuelve a flirtear con el equipo azulgrana, que le reserva una plaza para que sea su nuevo líder.