La seguridad del Palau Blaugrana falla en el Barça-Olympiacos
Hinchas de los dos equipos estuvieron mezclados en las gradas del pabellón del Barça
26 abril, 2024 02:02Noticias relacionadas
El Barça perdió el primer asalto de los cuartos de final de la Euroliga contra el Olympiacos. Más allá de la derrota, algunos aficionados barcelonistas criticaron las medidas de seguridad del Palau Blaugrana.
Olympiacos contó con el apoyo de unos 250 aficionados, ubicados mayoritariamente en la zona alta del lateral. Pero también hubo hinchas griegos en otras zonas del pabellón, mezclados con seguidores del Barça, que se quejaron por su comportamiento.
Pabellón seguro
El Barça informó de que 7.328 aficionados se dieron cita en el Palau. De manera aleatoria, algunos aficionados eran registrados cuando accedían a las gradas. Otros, no. Pero el Palau es un pabellón seguro, con una afición muy animosa, pero correcta.
Los aficionados del Olympiacos no protagonizaron incidentes. A diferencia, por ejemplo, de los hinchas del PSG, no insultaron al Barça ni lanzaron objetos contundentes contra los barcelonistas.
Compra por internet
El Barça vendió un pack de entradas al Olympiacos para sus aficionados, como hace con otros equipos. El problema radicó en que algunos hinchas griegos compraron sus tickets por internet, a través de la web oficial del club azulgrana.
El Barça y el Olympiacos se enfrentarán el viernes en el segundo partido de los cuartos de final. El equipo de Roger Grimau está obligado a ganar. Si lo consigue igualará la serie y, como mínimo, deberá ganar un partido en Grecia para evitar su eliminación. Si pierde otra vez en Barcelona, sus opciones serán mínimas.
Un mal día
En el primer partido, Olympiacos puso en evidencia los grandes problemas del Barça. El equipo azulgrana estuvo muy blando en defensa. Faltó un líder el día que Ricky Rubio estuvo más acertado en el tiro que en la dirección y Laprovittola estuvo muy errático. Igual que Vesely. Sorprendió también que Grimau prescindiera de Darío Brizuela en un partido que no supo agitar suficientemente el Barça.