El posible fichaje de Ricky Rubio por el Barça resolvería muchos problemas en el Palau Blaugrana. Juan Carlos Navarro, el manager general de la sección, es el gran defensor de su contratación, que condicionará la configuración de la plantilla de la próxima temporada.
Roger Grimau, actual entrenador del Barça, estaría encantado de tener a Ricky Rubio. Más allá de su carisma, de su historial y de su buena dirección, el base de El Masnou resuelve un problema muy importante: la falta de liderazgo en el equipo.
Grandes jugadores sin liderazgo
El Barça cuenta con grandes jugadores como Satoransky, Laprovittola, Parker, Hernangómez y Vesely, pero ninguno es un líder natural. Un jugador con carácter y galones. Ricky sí lo tiene.
Ricky, además, es un jugador muy intenso. Muy bueno defensivamente. Es un jugador que contagia vitalidad y sacrificio. En ataque también ha mejorado mucho desde que dejó el Barça.
Las salidas
El fichaje de Ricky supliría la probable marcha de Jokubaitis a la NBA, mientras que Jokucionis podría ocupar la plaza de Oriol Paulí. Para Grimau ya no es tan necesario la búsqueda de un escolta lanzador tras la eclosión de Darío Brizuela, cada vez más protagonista en el Barcelona.
Navarro prepara las salidas de Paulí y de Da Silva. También deberá negociar las renovaciones de Kalinic y Parker, dos jugadores muy importantes para Grimau. La prioridad será el fichaje de un ala-pívot defensivo y, posiblemente, de un escolta. Con Ricky Rubio, todo encaja mejor.