El fiasco del Barça en la Final Four de Kaunas facilitará la revolución que preparaba Joan Laporta en la sección de baloncesto. Habrá decisiones drásticas, motivadas por la endeblez económica del club y refrendadas por el enésimo fracaso continental. El recorte previsto para las secciones profesionales será finalmente del 15%, especialmente significativo en el basket y que compromete la continuidad de tres piezas básicas: Sarunas Jasikevicius, Nikola Mirotic y Cory Higgins. El presupuesto de la próxima temporada podría rondar los 36 millones de euros. El de la actual es de 43,2 millones, de los que 37 se destinan a sueldos y amortizaciones.
El futuro de Jasikevicius dependía, en gran parte, de la Euroliga. El técnico lituano tiene contrato hasta el 30 de junio y quedaba renovado automáticamente si el Barça se proclamaba campeón de Europa.
El futuro de Jasikevicius
El desenlace de la Euroliga complica el futuro de Jasikevicius, muy criticado por su planteamiento ante el Real Madrid en Kaunas. A la espera de la Liga Endesa, el Barça solo contemplaría la renovación del técnico lituano en caso de victoria final y rebaja salarial importante. Una opción que molestaba a Jasikevicius, quien hace dos meses ya lamentó que el club no hubiera contactado con él para abordar las altas y las bajas de la próxima temporada.
El Barça ya ha sondeado a otros entrenadores. El que más gusta a Laporta es Xavi Pascual, con quien el equipo ganó su segunda Euroliga, en 2010, meses antes de que acabara el anterior mandato del actual presidente.
El problema con Pascual
El gran problema del Barça es que Pascual tiene un año más de contrato con el Zenit y, sobre todo, un salario muy alto. Es uno de los técnicos con mejor cartel y "y debería aceptar una importante rebaja para volver al Barça", argumentan en el Palau. Menos se discute sobre el estilo de juego de los equipos de Pascual, mucho más cartesianos y rígidos que los de Jasikevicius.
El Barça también contactó con el exjugador Jaka Lakovic, pero el técnico esloveno ha renovado su contrato con el Gran Canaria hasta junio de 2025 y en el Palau no descartan el fichaje de un tapado, que podría ser un técnico catalán como Pedro Martínez, técnico del Manresa, o Joan Peñarroya, actual entrenador del Baskonia
El contrato de Mirotic
Jasikevicius está contra las cuerdas. Igual que Mirotic. El ala-pívot hispano-montenegrino cobra más de 10 millones de euros brutos por temporada y su contrato termina en 2025. "Me gustaría cumplir el contrato, pero no es seguro", admitió tras la frustrante derrota contra el Real Madrid en la Final Four.
Mirotic no tiene buenas sensaciones. Sabe, desde hace meses, que Laporta quería rebajar su salario y él no está por la labor de renunciar al sueldo actual porque aceptó la oferta del Barça tras rechazar otras superiores de la NBA.
El caso de Calathes
Laporta siempre ha querido meter mano al contrato de Mirotic desde que ganó las elecciones del 7 de marzo de 2021. El ala-pívot fue un fichaje del expresidente, Josep Maria Bartomeu. Igual que la contratación de Jasikevicius.
El Barça podría darle la carta de libertad a Mirotic, pero el jugador podría reclamar los dos años de contrato que le quedan. O, al menos, uno. El escenario podría ser parecido al del pasado verano cuando el club le notificó a Calathes que rescindía su contrato.
Otras bajas
Juan Carlos Navarro, mánager de la sección de baloncesto, también podría negociar con Higgins la rescisión anticipada de su contrato, que termina en 2024. La actual lesión que padece el escolta estadounidense en la espalda dificulta su salida del Palau.
En el Palau contemplan más salidas. Kuric, Sanli y Tobey acaban contrato y, salvo sorpresa, ninguno de los tres seguirá en el Palau. El único que podría continuar es el escolta estadounidense si Higgins rescinde su contrato con el club. Kuric, curiosamente, ha sido tentado por el Real Madrid. Jokubaitis, por su parte, podría dar el salto a la NBA.
Dudas con Navarro
El Barça, condicionado por sus problemas económicos, deberá apostar por jugadores formados en sus categorías inferiores. Ubal, Caicedo y Nnaji son quienes tienen más opciones de jugar la próxima temporada en el primer equipo. También podría tener su oportunidad Bonilla, a la espera del posible regreso de Bolmaro si rebaja sus pretensiones económicas.
La sección de baloncesto se prepara para un nuevo ciclo. Como mínimo, proyecta cinco bajas. El fin de curso pinta mal, con Laporta preparado para pasar la tijera en una sección que ya le dio muchos problemas en su primer mandato. Entonces encontró la solución con el fichaje de Chichi Creus como director deportivo. Navarro, en cambio, suscita muchas más dudas y en el Palau lamentan que el actual presidente no tenga un plan a medio plazo. Le acusan de no preocuparse por el futuro de las secciones y recuerdan que el futuro Palau ni tan siquiera tiene proyecto y, mucho menos, financiación.