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El vestuario del Real Madrid es un polvorín. El ambiente es cada vez más tenso en el equipo merengue, especialmente por la aglomeración de estrellas. A varios futbolistas no les ha sentado bien la pérdida de protagonismo, como es el caso de Jude Bellingham. El centrocampista inglés ha estado en el foco de atención en las redes sociales a partir de una sorpresiva rabieta contra Vinicius Júnior en la victoria contra el Celta en Balaídos.

El origen del problema fue una acción individual de Vinicius en la que regateó a un par de jugadores rivales. Bellingham esperaba el pase de su compañero, pero finalmente la acción terminó con el disparo de zurda del delantero brasileño. El esférico se fue por encima del arco y el internacional con Inglaterra explotó de la rabia al no ser visto en el segundo palo. Los gritos de Jude se escucharon por todo el estadio.

Hay conflicto

Bellingham no está llevando bien el descenso de protagonismo en el Real Madrid. Sus malas formas empiezan a ser cada vez más cómunes. No solo con los árbitros y los rivales, sino también con un compañero de equipo. La tensión con Vinicius ha crecido considerablemente en las semanas previas al Balón de Oro, donde el centrocampista sabe que el extremo brasileño es el principal candidato a llevarse el trofeo. Aunque desde su perspectiva considera que debería ser el ganador tras ganar la Champions League y ser finalista de la Eurocopa 2024.

Es un problema enorme el que tiene Ancelotti en el vestuario. Ya le ha sucedido con Rodrygo Goes y ahora con Jude. El Real Madrid no ha logrado asimilar de la mejor manera la presencia de tantas estrellas ofensivas, lo que puede terminar en una gran explosión que perjudique por completo los planes de pelear por los principales títulos.

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