El jugador del Real Madrid, Vinicius Jr, ha copado la actualidad deportiva por sus bailes durante las celebraciones y los insultos racistas sufridos. La afición del Atlético de Madrid profirió cánticos ofensivos contra el extremo brasileño en la previa del derbi madrileño. Sin embargo, entre tanto bombo mediático quedó eclipsada una jugada que destapa el juego sucio del atacante de 22 años.
Vinicius teatralizó una caída tras una carga de Marcos Llorente con el hombro. De hecho, el internacional con la canarinha ya gritó antes de cruzarse con el futbolista del Atleti. Y ni siquiera había recibido golpe alguno todavía por parte del rival cuando comenzó a chillar.
El engaño por costumbre
El futbolista del Real Madrid suele caer al suelo con facilidad en los encuentros, a fin de engañar al árbitro. Muchas carreras de Vinicius culminan en un callejón sin salida, y la falta es un recurso más para asegurar la posesión del balón.
Las exageraciones son una constante en el juego de Vini, que como muchos otros futbolistas trata de engañar al colegiado con artimañas. Por supuesto, este juego sucio viene acompañado de las excepcionales dotes futbolísticas del carioca.
Vinicius baila con Rodrygo tras un gol del Madrid en el Wanda REDES
Vinicius baila con Rodrygo tras un gol del Madrid en el Wanda REDES
Víctima de insultos racistas
El futbolista blanco también ha vivido la cara más amarga del fútbol con los insultos procedentes de la afición colchonera. En los prolegómenos del derbi capitalino, varias decenas de simpatizante rojiblancos se concentraron en los aledaños del Wanda Metropolitano y entonaron cánticos racistas: "Vinicius eres un mono".
El Movimiento contra la Intolerancia denunció ante la Fiscalía de Delitos de Odio los graves insultos sufridos por el brasileño. Vinicius también se pronunció, tras la victoria del Real Madrid (1-2): “Son danzas para celebrar la diversidad cultural del mundo. Acéptenlo, respétenlo. Yo no voy a parar". La polémica por los improperios hacia el brasileño ya estalló en Mallorca, a raíz de la danza del delantero tras anotarle un tanto al equipo bermellón.