Florentino Pérez descuelga el teléfono (y activa el plan B para el banquillo)

Incendio en el Real Madrid. El conjunto blanco sumó la segunda derrota consecutiva tras caer, en su estreno en la Champions League, ante el Shaktar Donestk. Sin embargo, lo peor no fue el resultado (2-3) sino la actitud del equipo madridista. Sin ganas, sin motivación, bajando a defender caminando... y todo ante la cenicienta de su grupo, y que además llegaba con medio equipo de baja por coronavirus. 

Con esta derrota, a los hombres de Zidane se les complica su acceso a octavos de final. Los próximos partidos serán ante Inter de Milán y Borussia Monchengladcach, teóricamente muy superiores a la ucranianos. Con este juego, la entidad de Chamartín podría sufrir incluso para entrar en Europa League. 

Los jugadores del Madrid, abatidos tras caer en su estreno en Champions | EFE

Los jugadores del Madrid, abatidos tras caer en su estreno en Champions | EFE

Los madridistas llevan una semana negra, con derrotas ante equipos muy inferiores tanto a nivel de presupuesto como de calidad. Este sábado, el FC Barcelona podría poner la puntilla en el Camp Nou, y desterrar a un Zidane que cada vez está más cansado. 

El plan B de Florentino

Florentino está en deuda con Zidane, y no le despedirá. Sin embargo, eso no quita que pueda presionarlo hasta la extenuación para forzar su marcha 'voluntaria' por el bien del Real Madrid. Y es que el francés nunca se ha visto haciendo un Ferguson y acabando su carrera en el Santiago Bernabéu. Otros proyectos como la selección francesa o la Juventus de Turín le seducen mucho más que estar toda la vida en la capital. 

En este sentido, al máximo mandatario madridista tampoco le preocupa mucho cuándo pueda llegar ese momento. Ya tiene atado desde hace años al que será su relevo como técnico del Real Madrid: Raúl González Blanco. En 2018, le dio la oportunidad de entrenar en la cantera merengue, con el claro objetivo de que un día llegase al Bernabéu. 

Raúl González, entrenando a la cantera del Real Madrid | EFE

Raúl González, entrenando a la cantera del Real Madrid | EFE

No obstante, su rendimiento está sorprendiendo gratamente. Fue capaz de levantar este verano el gran título que le faltaba a La Fábrica, la UEFA Youth League. Lo que le valió el ascenso automático al Real Madrid Castilla. Ahora, sigue calentando, como hizo Zidane en su día, en los campos de barro de Segunda B, esperando una oportunidad que llegará más pronto que tarde. Florentino está en contacto constante con él, y es consciente de las carencias y de la situación del primer equipo. Por lo que sabe que su momento acabará llegando.