El Real Madrid tiene la Liga a tocar con la punta de los dedos. Y tendrá que agradecer parte de este título al VAR. Desde principio de temporada, los hombres de Zidane han sido el equipo más favorecido por las actuaciones del videoarbitraje. Y este hecho ha quedado todavía más manifiesto tras el parón.
El club presidido por Florentino Pérez ha recibido ayudas en prácticamente todos los choques tras el regreso de la competición. Gerard Piqué ya advirtió en Sevilla que "viendo las dos jornadas que llevamos, será muy difícil que el Real Madrid pierda puntos". Y se está confirmando.
Martínez Munuera, revisando un gol del Real Madrid | EFE
Mallorca, Eibar, Valencia... en todos los partidos en que el conjunto blanco se ha encontrado con problemas para sacar los tres puntos, no ha tardado en aparecer el videoarbitraje para facilitar la faena a la entidad de Chamartín. Y en un duelo clave para el título como era el de San Mamés, evidentemente también tenía que hacer de las suyas el arbitraje. Sin embargo, las ayudas arbitrales no están siendo las únicas ventajas con las que está contando la entidad de Chamartín tras el regreso del campeonato.
Fondo de armario
Otro de los detalles que está jugando a favor del conjunto madridista tras el parón es el fondo de armario. Zinedine Zidane cuenta con hasta 19 futbolistas de primer nivel y con calidad de titular. Prácticamente dos por posición. Por eso, el hecho de aumentar el número de sustituciones a cinco también ha ayudado al equipo blanco en este final de temporada.
El banquillo del Real Madrid, en una imagen de archivo | EFE
Por ejemplo, en el último choque en San Mamés, el técnico galo pudo dejar en el banco a jugadores de la talla de Toni Kroos, Isco, Gareth Bale o Ferland Mendy. En cambio, el Barça ha tenido muchos más problemas en este sentido, teniendo que recurrir a muchos canteranos para poder completar las convocatorias.
El factor Zidane
También ha tenido un papel determinante en la parte final del campeonato el factor Zidane. Tanto por la flor del míster galo en los encuentros igualados, como también el hecho de ser respetado por todo el vestuario han favorecido a la plantilla madridista. En cambio, Quique Setién se ha tenido que enfrentar a un incendio constante en Can Barça semana tras semana. Su cuerpo técnico no ha conseguido ganarse la confianza de los pesos pesados del vestuario, y excepto en los últimos días, se veía un club donde jugadores y staff escogían caminos totalmente distintos.
Zidane y Setién, en un Madrid-Barça | EFE
Finalmente, el ecosistema en el Santiago Bernabéu ha sido de mucha más calma de cara al final de curso. Los futbolistas han podido centrarse exclusivamente en jugar y rendir en el campo. En cambio, en el Barça no ha sido así. La renovación de Messi, las suplencias de Griezmann, el caso Barçagate... no ha habido paz. Y esto ha afectado a unos jugadores cansados de la polémica. Una Liga que se decidirá por detalles. Pequeños pormenores que están cayendo la mayoría del bando merengue.