El Real Madrid se volvió a despedir del liderato este domingo. Los de Zinedine Zidane perdieron en el Benito Villamarín en uno de los peores partidos de la temporada. El Betis les pasó por encima de principio a fin y el resultado de 2-1 es engañoso. Podían haber caído muchos más goles.
Ante los medios de comunicación, los protagonistas no se escondieron. El entrenador galo comentó sin tapujos que “hicimos un mal partido desde el principio hasta el final. No entramos en el juego en ningún momento. Hemos perdido muchos balones y ha sido un mal partido. Soy yo el responsable, pero no tengo explicación. No podemos estar contentos con el partido”.
Tello y Loren celebrando el gol contra el Real Madrid / EFE
Los blancos presentaron un once con algunos cambios -entraban Marcelo, Militao, Modric…- que no rindieron sobre lo esperado. “Nos ha costado mucho. Creo que los jugadores lo han intentado, pero no nos ha salido nada. La culpa la tengo yo y tengo que analizar a ver qué nos ha pasado. Lo que hay que hacer es mirar adelante porque lo que hicimos hasta ahora no lo hicimos mal. Faltan 11 partidos y que hay que pelear”, apuntó.
Las palabras del capitán
Sergio Ramos también habló después del encuentro. A diferencia de Zidane, se expulsó un poco la responsabilidad con un “cuando no se hacen las cosas bien, y si estamos intermitentes... El resultado es justo. Es una putada perder el liderato. Nos hemos acomodado atrás, necesitábamos más intensidad. Hay que reflexionar”.
Aunque no dio nombres, el centro del campo estuvo muy lento en las transiciones y tampoco supo controlar el partido. En posiciones defensivas salieron retratados los laterales -Militao y Marcelo- que ni atacaron ni defendieron. Fekir, Canales y Joaquín hicieron lo que quisieron con ellos.
Zidane con Sergio Ramos en el Betis-Madrid / EFE
También quedó retratado Benzema, que sigue con su problema con el gol, aunque transformó el penalti. Sergio Ramos aprovechó para mandarle un mensaje y colgarse una medalla al cederle la responsabilidad de la pena máxima: “Lo importante es el estado anímico del grupo y le venía bien para coger confianza”.
El clásico, un espejismo
El Real Madrid venció al Barça en el clásico por orgullo y pegada pero la realidad es que no pasan por un buen momento. Están igual o peor que los culés y deberán sudar sangre si quieren llegar a las últimas jornadas con opciones de título. Los números de los últimos cinco partidos son muy malos.
De 15 puntos posibles han conseguido un total de siete, menos de la mitad. Ganaron cómodamente al Osasuna (1-4) pero cayeron contra el Levante (1-0) y empataron contra el Celta de Vigo (2-2). Recientemente vencieron al eterno rival (0-2) y naufragaron en el Benito Villamarín (2-1).
Los jugadores del Celta celebran un gol en el Bernabéu | EFE
En medio de estos encuentros también hemos visto partidos en que los blancos han sufrido más de la cuenta. Cayeron en Copa del Rey contra la Real Sociedad (3-4) y pincharon en el partido de ida de octavos de la Champions League contra el Manchester City (1-2). Esta semana reciben al Eibar y viajan al Etihad en una final. Dos derrotas, dejarían a Zidane en el punto de mira.