La mejor noticia para Hansi Flick antes del Chelsea-Barça de la Champions League: la lesión más surrealista

El Barça tiene por delante unos días más que interesantes en lo que a partidos respecta. Primero, los azulgranas se verán las caras ante el Athletic Club este sábado en el Camp Noy y, por si no fuera poco, el próximo martes viajarán a Londres para enfrentarse al Chelsea en la Champions League. Los blues atesoran los mismos puntos que los culés en la tabla (7) y necesitan una victoria tan imperiosamente como el FC Barcelona. Sin embargo, dicha hazaña será más complicada tras anunciarse la lesión de una de sus máximas estrellas. Un caso surrealista y de lo más absurdo.

Fractura del dedo meñique del pie

Este viernes, en la rueda de prensa previa al Burnley-Chelsea de la Premier League, Enzo Maresca, técnico del cuadro londinense, confesó que uno de sus jugadores no podrá estar disponible para enfrentarse al Barça a causa de una nueva lesión. La explicación es inimaginable.

"Cole Palmer ha tenido un accidente en casa en el que se ha golpeado el dedo. Seguro que no jugará en este partido, y seguro que tampoco con el Barcelona ni con el Arsenal. Por desgracia, hace dos días tuvo un accidente en casa y se golpeó un dedo del pie. Se lo ha fracturado. Es una pena, pero estas cosas pasan", confirmó Maresca, que pierde su mejor pieza para romper la defensa azulgrana el próxima martes.

En el peor momento

Dicha fractura de dedo llega en el peor momento para Palmer. El '10' blue estaba recuperándose de una lesión en la ingle, que le ha mantenido fuera de los terrenos de juego durante dos meses. La situación, por más surrealista que pueda ser, es fruto de una acción cotidiana, o al menos eso ha señalado el técnico del Chelsea en rueda de prensa.

"Me ha pasado muchas veces que me despierto por la noche para ir al baño y me doy un golpe por el camino. Son cosas que pueden pasar. Estaba muy cerca de volver. Casi se había recuperado de la ingle, lo cual son muy buenas noticias, pero ahora tiene este pequeño problema", concluyó Maresca.