Hansi Flick tiene dudas. Normal. El Barça ha recuperado a casi todos sus futbolistas. Solo Ter Stegen, Andreas Christensen y Marc Bernal están lesionados. En la portería, en la defensa y en el ataque, los papeles están muy claros. En el centro del campo, no.
El Barça tiene, posiblemente, la mejor sala de máquinas de España y de Europa. Tiene futbolistas de primer nivel, con perfiles distintos, que suelen encajar muy bien. El problema es que algunas piezas encajan mejor con otras y la mezcla no siempre es posible.
Pedri, intocable
Pedri es, posiblemente, el único centrocampista intocable. Es la gran referencia en el centro del campo. Es un futbolista exquisito, con mucha técnica, una gran lectura de los partidos y, además, roba muchos balones.
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Flick tiene el gran debate de decidir el nombre de los dos futbolistas que deben asociarse con Pedri. El mediocentro y el mediapunta.
El mediocentro
Frenkie de Jong y Casadó compiten por la primera demarcación. El neerlandés es más técnico y rompe más líneas de presión. El segundo es más defensivo, más intenso.
Dani Olmo da un pase en el partido del Barça contra la Real Sociedad
Lewandowski y Gavi entran en lugar de Ferran y Olmo en el Barça-Atlético de Copa
Un debate parecido tiene Flick en la mediapunta con Gavi y Dani Olmo. El andaluz es un futbolista muy competitivo, ideal para presionar a los defensas rivales. Aporta carácter. El jugador de Terrassa, por su parte, es más exquisito. Se mueve mejor en espacios reducidos y es una bendición para los delanteros por su facilidad para filtrar pases.
Las dos parejas
Fermín López, un jugador mucho más directo, es la alternativa. Suele ser más revulsivo que titular en un Barça con muchos recursos, cada vez más conjuntado.
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Flick es partidario de que Frenkie y Gavi jueguen juntos. O, en su defecto, lo hagan Casadó y Dani Olmo. Es su apuesta por un Barça equilibrado, que combine talento y sacirificio. En Lisboa, Dani Olmo apunta a titular, pero cuesta pensar que Frenkie comenzará en el banquillo. Veremos.