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No es un superdotado técnicamente. Ni físicamente es imponente. Ni tuvo un ascenso al primer equipo sencillo. Hace un año, Xavi Hernández buscaba desesperadamente un mediocentro, pero no contaba con él, imprescindible entonces para Rafa Márquez. Ahora, Marc Casadó es una pieza básica para Hansi Flick. Con él de titular, el equipo azulgrana ha logrado 13 victorias.

El Barça, con Casadó, funciona mucho mejor que sin él. Es el futbolista que equilibra al equipo. Le da una buena salida al balón y corta muchas pelotas complicadas. También transmite energía y es solvente. Es el tipo de futbolista que gusta a Flick.

Expulsión en Vigo

Casadó es el nuevo Kimmich de Flick. Sin él en el campo, todo es más difícil. En Vigo, ganaba el Barça al Celta por 0-2 cuando fue expulsado. En 10 minutos, el equipo gallego marcó dos goles y dejó tocado al líder. 

Casadó felicita a Raphinha tras un gol del delantero. EFE

El pasado sábado, en Montjuïc, Flick se inventó a Gavi como mediocentro, y el invento no funcionó. El centrocampista andaluz tiene chispa, pero le falta pausa y una mejor lectura de los partidos. Casadó, curiosamente, tampoco fue titular en Pamplona (4-2). Con él en el once inicial, el Barcelona solo ha perdido en Anoeta, en Liga, y en Mónaco, en Champions.

Regreso afortunado

Casadó regresó en Son Moix y el Barça ganó. Casualidad o no, el equipo de Flick estuvo más acertado al tirar el fuera de juego y en la presión al rival. El mediocentro contagia su espíritu combativo.

Casadó, con contrato hasta 2028, es el nuevo Busquets del Barça. Su actual valor de mercado es de 15 millones de euros y en la actual temporada ya ha participado en 17 partidos en los que ha dado cinco asistencias.

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