El Barça ultima la preparación para un compromiso de Liga que suena a palabras mayores. Después de imponerse al Valencia en el estreno de competición doméstica (1-2), el Athletic Club pondrá a prueba a los pupilos de Hansi Flick en Montjuïc. El técnico alemán todavía desconoce si podrá contar con la plantilla al completo por dos motivos: la inscripción de Dani Olmo y la baja inesperada de Andreas Christensen. El club azulgrana trata de cumplir con su promesa contra reloj y así inscribir al nuevo fichaje.

En cuanto al central danés, no ha saltado al césped para ejercitarse con sus compañeros. El defensor sufre molestias en los gemelos, por lo que se ha quedado en el gimnasio. Mika Faye se ha pasado por la Ciutat Esportiva Joan Gamper para despedirse de sus compañeros antes de poner rumbo al Rennes de la Ligue 1. Vitor Roque ya no ha pisado las instalaciones, a un paso de formalizar su cesión al Real Betis Balompié.

Venta innegociable

Más allá de la ausencia de Christensen debido a una dolencia, no hay caso sobre su futuro. El zaguero de 28 años quiere permanecer en el club azulgrana y no formará parte de la operación salida. Como hemos podido saber en Culemanía, Flick tampoco pretende desprenderse de un futbolista polivalente y dotado de talento. Pese a las presuntas informaciones que sitúan al defensor en la rampa de salida por 25-30 millones, su futuro será de color azulgrana.