El Barça resiste en la Liga, pero solo se ilusiona con la Champions, con el partido de vuelta de los cuartos de final contra el PSG. En Cádiz, ante un rival muy necesitado, al equipo de Xavi Hernández le bastó con Joao Félix para ganar un partido sin chispa ni brillo. Ganó el cuadro azulgrana por oficio y por la magia del delantero portugués, un futbolista poco sacrificado pero con mucho talento.
Xavi no va de farol, pero casi. Hace tiempo que tiene claro que la Liga será del Real Madrid, pero el Barça irá a por todas en la Champions. Y más tras ganar en el Parque de los Príncipes. Tres días antes del partido de Montjuïc, el técnico revolucionó la alineación, dando entrada a Héctor Fort, Marcos Alonso, Oriol Romeu, Sergi Roberto, Fermín, Ferran Torres, Vitor Roque y Joao Félix.
Un Cádiz con las líneas juntas
El Cádiz, con la soga al cuello, no estaba para inventos. El equipo gaditano se juega la supervivencia y ve cada día más cerca la salvación, ni que sea porque el Celta no da síntomas de mejora. Mauricio Pellegrino, exjugador azulgrana, apostó por juntar las líneas y una presión baja para desactivar a un Barça que tuvo el balón, pero no demasiada profundidad.
El partido era un tostonazo, con un Barça inoperante y un Cádiz más preocupado de proteger a Ledesma que de inquietar a Ter Stegen, y su primer remate a puerta, de Álex Fernández, llegó en el minuto 22.
Espectacular gol de Joao Félix
El Cádiz llegaba en alguna contra. Ledesma tenía menos trabajo, aunque tuvo un pequeño susto con un centro-chut de Héctor Fort. En el Barça, solo Fermín intentaba agitar el partido, que solo se animó con la chilena de Joao Félix que sorprendió a la defensa gaditana y a Ledesma.
El gol calmó al Barça y enrabietó al Cádiz, que endureció el juego, pero pocas más cosas pasaron en una primera parte para olvidar. Más ambicioso se mostró el cuadro amarillo en el segundo acto. En el Barça solo pasaban cosas cuando Joao Félix tenía la pelota, porque al portugués le sobra clase.
Remate al poste
A la hora del partido, Xavi movió el banquillo y dio entrada a Pedri, Koundé y Lamine Yamal por Fort, Christensen y Vitor Roque, que no aprovechó la ausencia de Lewandowski para reivindicarse. El Cádiz, con pocas ideas, sufría con las largas posesiones del Barça, que pudo sentenciar a 20 minutos del final con un remate al poste de Joao Félix.
El Barça tocaba y tocaba. Se defendía con el balón. Le bastaba con negarle la pelota al Cádiz, que una semana es carne de cañón. Los culés, mientras, hicieron lo justo para ganar, a la espera del PSG. Su gran batalla.