El Barça es un equipo deprimido. Indescifrable. Ni tan siquiera intimida a un rival de medio pelo como el Amberes, que había perdido sus cinco partidos. El grupo de Xavi se desmorona como un castillo de naipes día tras día. Y ni tan siquiera supo conservar un gol de Marc Guiu en el tiempo de añadido que parecía calmar el desastre de Bélgica. En la siguiente acción, Ilenikhena le sacó los colores a un Barcelona horrible, indigno, patético, que mucho deberá mejorar si no quiere recibir otro duro correctivo en octavos de final, aunque terminado la fase de grupos en primera posición.
Xavi Hernández agitó al Barça con una alineación revolucionaria, pero, sorprendentemente, con Lewandowski en el equipo titular. El delantero polaco no fue inicialmente convocado por el técnico, pero se desplazó a Bélgica tras las recomendaciones de Laporta.
Horrible inicio y gol belga
Hubo menos novedades de las esperadas. La más sonada fue la alineación de Héctor Fort como lateral derecho. Más esperada eran las titularidades de Oriol Romeu, Sergi Roberto, Fermín y Lamine Yamal en un Barça que casi no se jugaba nada en Amberes. Si acaso, el primer puesto del grupo H.
El partido comenzó muy mal para el Barça, totalmente empanado y muy errático en la salida del balón. Fort falló en la primera pelota que tocó, pero más errática fue la combinación entre Iñaki Peña y Oriol Romeu que permitió a Vermeeren marcar el primer gol del partido.
Un Barça ansioso
El Barça acusó el golpe. Intentó corregir el estropicio por la vía rápida y la ansiedad fue su peor rival. Hasta 17 pelotas perdió el grupo de Xavi en los primeros 24 minutos, un claro síntoma de la falta de confianza de un equipo irreconocible, blando en defensa y sin rematar a puerta.
Pintaba mal el partido a pesar de la fragilidad del Amberes. El Barça era la viva imagen de la impotencia, pero Ferran marcó en la primera ocasión de gol barcelonista, tras una meritoria acción en el minuto 35.
Otro error de Oriol Romeu
Mejor parecía empezar el Barça en la segunda parte, con un zurdazo de Lamine Yamal que se estrelló en el travesaño, pero el de Xavi no es un equipo fiable y otro error de Oriol Romeu en el minuto 56 le costó el segundo gol al equipo azulgrana. Yusuf le robó la cartera al mediocentro culé en el gol de Janssen.
El Amberes se encontró con un premio inesperado que protegió con uñas y dientes. El Barça se adueñó del balón, pero no tuvo ideas ni criterio el equipo de Xavi, demasiado impreciso. Y cuando logró empatar gracias a un gol del joven Marc Guiu, fue zarandeado por tercera vez en la siguiente acción para frustración de un Xavi que está al borde del precipicio.