Lío a la vista: el fichaje del Barça que se complica

La dirección deportiva del FC Barcelona tiene varios frentes abiertos de cara al próximo mercado de fichajes veraniego. El Barça trata de rebajar el pago de 18 millones de euros por la opción de compra de Yannick Carrasco con la inclusión de Sergiño Dest. Sin embargo, el Atlético de Madrid quiere el pago íntegro del importe y solo negociará por futbolistas de su agrado como Ferran Torres y Ez Abde.

El precio pactado proviene de la venta de Memphis Depay al equipo colchonero por tres millones fijos, más uno en variables. El club azulgrana se reservó una futura opción de compra por el extremo belga, cifrada en esos 18 kilos. No obstante, el escaso margen de maniobra con el Fair Play Financiero impide realizar un esfuerzo económico por el atacante de 29 años.

El Atlético se planta por Carrasco

Medios españoles informan que el club rojiblanco se planta, y solo sopesará la forma del intercambio si Ferran Torres o Ez Abde entran en la operación. De todas formas, la directiva madrileña no comprende que el Barça trate de disminuir un importe que en enero sí daba por valido.

Precisamente, en el mercado invernal, el máximo mandatario del club, Enrique Cerezo, ya salió victorioso con la compra de Memphis Depay. Y es que el Barça pretendía un trueque por el delantero neerlandés. Pero el Atlético rechazó dicha fórmula, pues el jugador internacional con Países Bajos terminaba contrato en junio de 2023, y Carrasco en 2024. Por lo tanto, la directiva rojiblanca consideró superior la cotización de Yannick.

Yannick Carrasco disputa el balón contra Jules Koundé / EFE

Yannick Carrasco disputa el balón contra Jules Koundé / EFE

Carrasco, solo al Barça

Por su parte, el extremo rojiblanco tiene al Barça entre ceja y ceja, y no piensa recalar en ningún otro equipo. Así lo ha comunicado el también representante de Robert Lewandowski, Pini Zahavi. Con esto, el Atleti cuenta con otros equipos interesados en el futbolista, y se niega a perder dinero con el desembarco de Carrasco en el Camp Nou. 

El todavía director de fútbol del Barça, Mateu Alemany, busca la fórmula de persuadir al director general del Atlético, Miguel Ángel Gil Marín. El directivo mallorquín confía en la buena relación con su homólogo madrileño para desatascar la situación.