La derrota del FC Barcelona frente al Rayo Vallecano (2-1) en el Estadio de Vallecas deja a varios retratados en el peor partido de la temporada en LaLiga. Dos pérdidas de Pedri y Frenkie de Jong desencadenaron los goles del equipo franjirrojo. Tampoco Jules Koundé supo defender la jugada del primer gol con la determinación suficiente. Por su parte, Ter Stegen no alcanzó a atajar el balón del primer tanto, un tiro cruzado de Álvaro García.

El Barça jugó uno de los encuentros más incómodos de la temporada en la competición doméstica. Más allá de las nueve victorias saldadas con 1 a 0 en el marcador, en esta ocasión, el navío azulgrana naufragó en campo propio. Ni siquiera alcanzó el clásico asedio en campo rival de tropiezos contra equipos replegados. La presión del conjunto entrenado por Andoni Iraola dio sus frutos.

Pedri y Frenkie, faltos de ritmo

Tanto Pedri como Frenkie de Jong, faltos de ritmo, sufrieron en salida de balón. El interior canario disputó su primera titularidad liguera desde el 12 de febrero, y acusó la inactividad. Más allá del proceso para llegar a la plenitud física, al 8 azulgrana le robaron la cartera hasta dos veces en posiciones comprometidas.

Primero Óscar Trejo en el día de su cumpleaños, y más tarde un incombustible Sergio Camello generaron dos ocasiones manifiestas de gol tras despojar a Pedri del esférico. Además, las dificultades para sacar el balón de la zaga dirigida por Xavi Hernández obligaron al joven mediocampista a retrasar su posición hasta inscrustrarse entre los centrales.

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Pedri lucha por un balón aéreo contra un jugador del Rayo / EFE

 

La incomodidad de Frenkie

En lo que atañe a Frenkie, el mediocentro neerlandés no pudo trazar sus conducciones características con tal de rebasar líneas rivales. Los atacantes rayistas, siempre al acecho, desproveyeron a los centrocampistas del Barça más creativos de su clarividencia.

Para más inri, en el segundo gol, durante una pugna por el balón con Trejo, Fran García supo anticipar la jugada y robó el balón en carrera. Curiosamente, como un rayo, el lateral encaró la portería rival y pilló a los centrales del Barça abiertos.

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Frenkie de Jong persigue a Isi Palazón durante el Rayo Vallecano-FC Barcelona / EFE

Relajación de Koundé

Rara vez el cuadro de la Ciudad Condal ha concedido dos goles en un partido esta temporada, al menos, en la competición doméstica. De hecho, solo el Real Madrid hasta la fecha había endosado dos goles o más al equipo azulgrana. Y anoche, en Vallecas, el Rayo se convirtió en el segundo equipo en conseguirlo. 

Alguna que otra laguna defensiva tuvo incidencia directa en el primer gol. Sergio Camello avanzó hacia el balcón del área sin que ninguno de los centrales saltara. Tanto Koundé como Araújo guardaron la distancia. No obstante, el central francés olvidó la marca de Álvaro García, con la caña lista para cruzar un tiro certero y raso.

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Jules Koundé trata de llegar a blocar un tiro en el Rayo Vallecano-FC Barcelona / EFE

El central francés se relajó y llegó tarde a la definición del extremo del Rayo, que batió a Ter Stegen. El guardameta alemán tampoco alcanzó a desviar un tiro que en otras ocasiones sí que ha podido repelir. En cualquier caso, los errores poco habituales en el movimiento de los centrales condicionaron ese primer tanto