El FC Barcelona sonríe con Jules Koundé. El joven y polivalente defensor, a sus 24 años, se ha consagrado como titular indiscutible en el conjunto azulgrana. Fue una petición expresa de Xavi Hernández, que lo tenía tan claro al solicitar su incorporación que acabó propiciando un fichaje millonario. El Barça pagó 50 millones de euros fijos y 10 kilos más en variables, y el futbolista está cumpliendo con creces las expectativas.
Nadie nota la ausencia de Piqué
Tanto, que ha hecho que la retirada de Gerard Piqué, uno de los mejores defensores de la historia del club, no haya tenido ninguna incidencia negativa en los resultados del equipo. Piqué llegó a decir en su día que se impondría a cualquiera que llegase, pero no ha podido con Jules. Las cosas están mejor en el vestuario desde que no está el de la Bonanova. El equipo rinde mejor en defensa, trabaja más, es más solidario y está menos acomodado.
Nadie pone en duda la inmensa importancia que ha tenido Gerard Piqué en la última década para el Barça, pero lo cierto es que en los últimos años se había convertido en un mal ejemplo por muchos motivos. Principalmente, extradeportivos. Con Koundé, el Barça ha recuperado una solvencia defensiva donde también es clave la renovación de Araujo, la explosión de Alejandro Balde y la llegada de Christensen.
Cuatro defensas muy físicos, pero igualmente con calidad técnica y una fantástica capacidad de corrección cuando se pierde el balón. Prueba de ellos son los siete goles que el FC Barcelona ha recibido en 20 jornadas de Liga, lo que deja claro el excelso nivel que está mostrando el equipo en defensa.
Las posibilidades tácticas con Koundé
La presencia de Koundé en las alineaciones, además, posibilita jugar sin problemas con ese 3-4-3 que quiere Xavi, con cuatro centrocampistas y el trío Koundé-Christensen-Araujo como centinelas de Marc-André ter Stegen. En ese esquema, la figura de Alejandro Balde también es de suma importancia, a fin de adecuar al equipo en ataque con un 4-3-3 con falso extremo.
Koundé era clave para todas estas estrategias. Resulta indispensable no sólo gracias a su polivalencia, sino también por el hecho de tener técnica e inteligencia futbolística, que se juntan con unas cualidades físicas envidiables. Una serie de intangibles que permiten al galo brillar en el Barça. Y confirmar, partido a partido, que su fichaje fue todo un acierto.