El Barça presenta una queja a la UEFA por el arbitraje del Inter-Barça

Cuando se produce una injusticia, uno tiene que defenderse. Y eso es, precisamente, lo que piensa hacer el FC Barcelona tras el flagrante arbitraje que sufrió este martes contra el Inter de Milán. A petición del cuerpo técnico y bajo la aprobación absoluta de Joan Laporta, el Barça realizará una queja formal a la UEFA a través de sus servicios jurídicos, con imágenes y material audiovisual incluidos, con el objetivo de mostrar su más absoluta indignación ante lo que considera un “acto flagrante de injusticia”.

El FC Barcelona tiene la intención de pedir además que Van Boekel, el colegiado del VAR que también estuvo presente en el polémico Bayern-Barça (2-0) del penalti no pitado a Ousmane Dembelé, no vuelva a arbitrar nunca más al conjunto azulgrana, ni en el campo ni tampoco en la sala del VAR. “Ha sido un robo brutal", es la sensación que quedó en el vestuario culé nada más acabar el partido, y que tanto Eric García como Sergi Roberto y Xavi Hernández, entre otros componentes del equipo, intentaron transmitir a los medios.

Doble rasero de los árbitros contra el Barça

El objeto principal de la reclamación incluirá dos jugadas concretas. El Barça considera que el gol anulado de Pedri por unas manos anteriores de Ansu Fati es más que discutible, sobre todo echando una ojeada a la normativa. Ansu no es el jugador que marca, se ve claramente que sus manos son involuntarias y, además, no desvía la trayectoria del balón. Tampoco puede cortarse la mano después de que el portero del Inter, Onana, toque el esférico justo antes.

En la jugada de las manos de Dumfries, por otro lado, se ve claramente que al defensa le toca el balón en la mano, totalmente extendida y sin que nadie haya desviado justo antes la pelota. En su caso, además, sí cambia la trayectoria del esférico e impide el remate del jugador del FC Barcelona. Desde la entidad culé, además, no se entiende que se señale como mano la acción más que discutible de Ansu Fati y que, en cambio, la más clara de todas --la acción de Dumfries-- sea pasada por alto por el árbitro principal y por los componentes del VAR.

Xavi Hernández da indicaciones a Raphinha y Gavi / FCB

Xavi Hernández da indicaciones a Raphinha y Gavi / FCB

La tercera jugada que reclama el Barça

Esas son las dos jugadas principales que incluirá el Barça en su queja formal, pero hay una más: una entrada violentísima de Çalhanoglu a Sergio Busquets a la altura de la tibia que sólo mereció una amarilla, pero que bien podría haber sido considerada como roja directa. Demasiadas coincidencias, considera el club, para dejarlas pasar. Más aún teniendo en cuenta que se trata de un partido decisivo de Champions League, y que en la sala de VAR de Múnich estaba el mismo árbitro que en Milán. En Alemania, recordemos, el VAR miró a otro lado ante el penalti clarísimo que sufrió Dembelé cuando el marcador todavía se encontraba 0-0.

El FC Barcelona se siente claramente perjudicado por los árbitros en esta fase de grupos de UEFA Champions League 2022-23, y tomará cartas en el asunto antes de que la situación acabe siendo insostenible. Los blaugrana únicamente tienen tres puntos en el casillero, y en las próximas jornadas se jugarán el seguir vivos en esta competición. El Barça-Inter de la semana que viene será clave en sus aspiraciones.