Que Dembelé es un tipo de lo más peculiar y extravagante es algo ya sabido por todos. Se casó en Marruecos en diciembre sin que prácticamente nadie supiera que tenía novia, y ha llegado a firmar un nuevo contrato con el FC Barcelona después de meses y meses de incertidumbre, habiendo llegado incluso a quedarse sin contrato durante los primeros días de julio.
Ahora que ya se ha concretado su futuro, y tras la firma que estampó sobre el papel la semana pasada, ha trascendido una divertida anécdota que sacará una sonrisa a más de uno. Y es que el Mosquito puede parecer a veces una persona introvertida y callada, aunque lo cierto es que tiene mucho sentido del humor. Hace unos días, como es habitual con todos los jugadores que fichan por el Barça, a Dembelé se le pidió que dijera unas palabras al vestuario a modo de saludo, a fin de estrechar lazos y transmitir su motivación al grupo.
El troleo de Dembelé a sus compañeros
Dembelé empezó su discurso explicando que estaba muy feliz por seguir vistiendo la camiseta del Barça, por continuar al lado de sus compañeros y de Xavi, y que estaba muy comprometido con el equipo. Como prueba de ello, se soltó al pedir la capitanía. La solicitud generó un silencio entre sus compañeros, algunos de los cuáles se miraron entre sí. Al ver la sorpresa general, Dembelé sonrió y aclaró rápidamente que se trataba de una broma. Ahí es cuando todo el vestuario empezó a reírse a carcajadas, dando pie al cachondeo.
Cabe recordar que los cuatro capitanes actuales son Sergio Busquets, Gerard Piqué, Jordi Alba y Sergi Roberto, los cuatro canteranos del FC Barcelona que más años llevan vistiendo la elástica del primer equipo azulgrana. Por su controvertido carácter y surrealistas decisiones, parece complicado que Dembelé tenga opción de lucir el brazalete a corto plazo.
Dembelé, cada vez más integrado
A sus 25 años, en cualquier caso, no hay que descartar que de aquí a muchos años estemos hablando de toda una institución en el Barça. Por ahora ha firmado su nuevo contrato hasta junio de 2024, aunque no se descarta que pueda prolongar su estancia en el Camp Nou si, pasado ese tiempo, las dos partes llegan a un acuerdo.
Siempre ha sido un jugador con una calidad especial, y si explota definitivamente puede convertirse en uno de los mejores futbolistas del mundo en su puesto, como ya anunció Xavi Hernández poco después de su aterrizaje en el banquillo azulgrana. De momento, al Mosquito le tocará centrarse en hacerlo lo mejor posible la próxima temporada 2022-23. Y, a partir de ahí, ya se verá. Dembelé está más integrado que nunca en la plantilla del FC Barcelona, y el buen ambiente puede ser clave para acabar de explotar sus máximas cualidades sobre los terrenos de juego. Hay química en el equipo culé. Algo que, a veces, no se valora como se debería.