Baño de realidad el que se llevó el Barça de Koeman en el regreso de la Champions al Camp Nou. Los culés prácticamente dijeron adiós a Europa tras sufrir un duro correctivo a manos del PSG (1-4). Mbappé, con un hat-trick, dominó en casa de Messi y demostró que es el digno heredero del argentino. Los parisinos no dieron opción en ningún momento a un cuadro blaugrana inoperante. La vuelta, un puro trámite.
El Barça resiste
Choque de colosos en el Camp Nou. Desde el primer instante, el partido no defraudó. La Champions regresó a Barcelona dos meses después, y la realidad es que el equipo de Koeman dio la sensación que la esperaba con ganas. El técnico holandés salió con el once de gala e incluso se arriesgó con un Gerard Piqué que fue una de las mejores noticias de la primera mitad.
La igualdad fue la nota predominante de una primera parte en que Barça y PSG trataron de generar ventaja con sus armas. Los culés intentaron dominar el balón y cerrar los espacios para evitar las arrancadas de Mbappé. Por su parte, los parisinos trataban de presionar de forma intensa la salida de balón del conjunto blaugrana, para incomunicar a todos sus creadores.
Mbappé, la pesadilla del Barça en el Camp Nou | EFE
Mbappé, la pesadilla del Barça en el Camp Nou | EFE
En este contexto, fue una acción fortuita la que decantó la balanza. De Jong, tras una asistencia de Messi, forzó un penalti que el propio argentino aprovechó. Con esta mínima ventaja, el FC Barcelona se creció y pocos segundos después, Dembelé tuvo una ocasión clarísima para poner el segundo. Erró y dio vida al PSG.
Los franceses respiraron y asediaron la portería de Ter Stegen en busca del empate. El meta alemán salvó a los de Koeman pero nada pudo hacer ante Mbappé. La estrella de los parisinos protagonizó una maravillosa jugada individual y definió a la perfección para poner el 1-1. Un tanto que dio alas a un PSG que se lanzó a por el segundo. Sin embargo, el Barça consiguió resistir ante un equipo visitante superior, sobre todo en los últimos instantes.
Baño de realidad
Tras el paso por los vestuarios, se confirmó la supremacía del PSG en el Camp Nou. Los franceses se hicieron con el control total del balón y bailaron a un Barça inoperante. Se intuía que el segundo gol de los visitantes era cuestión de tiempo, y así fue. De nuevo, Mbappé fue protagonista al aprovechar un rechace de Piqué.
Un gol que no trajo la reacción de un conjunto blaugrana completamente impotente y superado. Pero no solo eso, sino que lo que sí comportó fue la tormenta francesa perfecta en Barcelona, con un tercer gol de Kean en jugada ensayada que destrozó a los culés y prácticamente les expulsó de la Champions.
Mbappé, celebrando un gol contra el Barça | PSG
Mbappé, celebrando un gol contra el Barça | PSG
Sin embargo, ni siquiera con el tercer gol los de Pochettino sacaron el pie del acelerador. Sobre todo un Mbappé obsesionado por conseguir su hat-trick, y que acabó consiguiendo. Con un Barça completamente lanzado al ataque, el delantero galo sentenció la eliminatoria al contraataque y demostró, en la casa de Messi, que lo tiene todo para ser su digno sucesor.