Los aficionados culés sonreirán para Navidad. El FC Barcelona venció al Valladolid (0-3) firmando un gran encuentro. Ronald Koeman sorprendió a todos cambiando el sistema: del 4-2-3-1 muy utilizado al 3-4-2-1 potenciando las bandas con carrileros y el centro del campo con libertad de movimientos.
En las bandas Sergiño Dest y Jordi Alba se sintieron muy cómodos, pero en el centro del ataque hubo un entendimiento que hacía mucho tiempo que no veíamos. Pedri González y Leo Messi tenían libertad total para crear las ofensivas y eso fue decisivo en los tres tantos del equipo.
El argentino vuelve a sonreír, y lo hace gracias al joven canario de 18 años. Se entienden a la perfección, se buscan y sus conexiones son muy resolutivas. Solo hay que ver el último gol del encuentro del martes, con un taconazo para el argentino que rompía la defensa pucelana. Tanto y abrazo fraternal.
Pedri y Messi celebrando el gol del argentino contra el Valladolid / EFE
Y es que Messi fue un día más el hombre del encuentro, marcando y haciendo jugar a su gusto los compañeros que lo rodeaban. Pero si el 10 es crucial en este equipo, aunque muchos se lo quieran cargar, también lo es Pedri González. De tener colgada la etiqueta de cedible en verano a ser un titular indiscutible en inverno. Cada día más consolidado.
Griezmann y Coutinho, sentenciados
Pedri ha demostrado que es quien mejor se entiende con el argentino. No se molestan en absoluto y sus combinaciones siempre suman, algo que no había ocurrido con Antoine Griezmann y Philippe Coutinho sobre el césped. Es habitual que las ocasiones terminen muriendo por dentro por culpa del efecto embudo: demasiadas piernas y poca claridad.
El canario convence a Koeman y lleva jornadas que es el indiscutible en la mediapunta, una posición que también es natural para el francés y el brasileño. Pero es que el ex de Las Palmas se ha ganado a pulso seguir siendo titular y con el sistema con dos carrileros dejó a los dos fichajes más caros de la historia del Barça en el banquillo.
Coutinho y Griezmann en el partido contra el Sevilla / FC BARCELONA
Griezmann llegó en verano de 2019 por 120 millones de euros, mientras Coutinho lo hizo en enero de 2018 por 120 fijos más 40 en variables. Pedri, un jugador que parecía no tener sitio en el primer equipo y que costó seis millones de euros este verano, se ha coronado como una de las mejores operaciones de los últimos años.
Con el canario parece que Messi ha encontrado el aliado que tanto necesitaba y buscaba desde que se fue Neymar Junior. Se han invertido 440 millones --Dembelé, Coutinho y Griezmann-- y la solución está siendo un chico apenas mayor de edad que solo tiene el fútbol en su cabeza.