Neymar Junior no vive unos tiempos felices. Este verano estuvo en boca de todos al volver a estar en órbita Barça. El extremo pidió a sus agentes que lo sacaran del PSG, pero los franceses no le dejaron salir a no ser que llegara una oferta exageradamente alta. Finalmente, se tuvo que quedar.
A base de goles y buenas actuaciones se está volviendo a ganar la hinchada de los parisinos, pero no lo ha tenido nada fácil. Sus salidas de tono y sus numerosas lesiones generan grandes dudas. Sin ir más lejos, el curso pasado, cuando se jugaban parte de la temporada contra el Manchester United el jugador vio el partido de vuelta desde la grada. Cayeron eliminados.
Neymar Junior lamentando una ocasión con el PSG / EFE
Esta temporada no empezó mucho mejor. Se lesionó en la preparación de la Copa América y no pudo disputar el campeonato. Brasil salió vencedora igualmente. Estuvo aproximadamente dos meses de baja, un período muy largo por una lesión en el tobillo. Algunos apuntan que se esperaba a decidir su futuro. Se perdió un total de cinco partidos con su equipo.
Nueva lesión
Cuando Neymar volvía a sonreír, recibe de nuevo un varapalo. Este domingo salió de titular en un partido amistoso de la canarinha contra Nigeria en Singapur. Apenas duró 11 minutos sobre el césped y pidió el cambio. Lo sustituyó Philippe Coutinho y, cuando llegó al banquillo, se le vio derrumbado y rompió a llorar.
Según informa la selección brasileña, se tratan de unas molestias en la parte posterior del muslo izquierdo. A falta de comunicado oficial, se duda que pueda disputar los próximos partidos con el PSG: contra el Niza, en la Ligue 1, y contra el Brujas, en la Champions League.
El brasileño no consigue una cierta estabilidad desde que salió del Camp Nou. Es un habitual de la enfermería y uno de los motivos que frenó su fichaje por el Barça. La inversión hubiera sido descomunal y no garantiza una cierta continuidad en su rendimiento. El tiempo está dando la razón al club.
Largo historial de lesiones
A estos problemas del muslo izquierdo, cabe sumarle un seguido de lesiones que disparan todas las alarmas en París. Fue firmado en verano de 2017 y se ha perdido un total de 52 partidos con el PSG en poco más de dos temporadas. Unos números que preocupan y mucho.
A los problemas de tobillo sumados al culebrón del verano -que le costaron cinco partidos- se le debe añadir una lesión en el pie que lo dejó 85 días -y 18 encuentros- en la grada cuando el equipo se jugaba su futuro en Europa. Ya tuvo el inicio de curso 2018-19 movido: problemas en los aductores que lo dejaron cuatro semanas fuera.
Una foto de Neymar abandonando el terreno de juego lesionado frente al Estrasburgo / EFE
Su primera temporada en París, la 2017-18, no le fue mucho mejor. Una fractura metatarsiana a principios de año le dejó 90 días y 16 partidos alejado de los terrenos de juego. A esto se le debe sumar problemas en el muslo y otras molestias más leves como heridas y golpes consecuencias de los partidos. Un fichaje que deja mucho que desear.