Regreso esperado para todos, pese a la hostilidad con la que el Parque de los Príncipes recibió a Neymar Jr. No hay perdón para un jugador que consideran un mercenario que ha faltado el respeto al club. Los hinchas no le perdonan y ni vestido de corto en su regreso a los terrenos de juego obtuvo la compasión de la afición francesa. 

Un reencuentro frío y distante que el brasileño se encargó de mejorar. El PSG se topó ante un Estrasburgo combativo, que se colocó con cinco defensas y apenas permitió generar ocasiones de gol claras. De hecho, los visitantes pudieron avanzarse en distintas ocasiones en el marcador. Y con el 0-0 en el luminoso, Tuchel recurrió a Icardi. 

Debutó como revulsivo, pero finalmente quien sacó las castañas del fuego fue el brasileño. Y menudo golazo. Acalló a todos sus detractores con una chilena que daba los tres puntos al conjunto de la capital francesa en el 92. La mejor forma de regresar y reivindicarse. Victoria y liderato made in Neymar. 

Los rumores de verano

Era un secreto a voces, pero por primera vez Neymar habló claro ante los micrófonos. Todo un mercado de verano rehuyendo a la prensa y evitando hacer declaraciones públicas para no poner en riesgo la operación regreso al Camp Nou.

Valoró el recibimiento de los aficionados, pero no escondió su deseo de salir del PSG: "Entiendo a los fans y sé que fue difícil para ellos. Pero de ahora en adelante soy jugador de PSG y ahora voy a dar todo en el campo".

La inflexibilidad del club francés le obliga a resignarse, pero el deseo se mantiene intacto: "Estoy acostumbrado a ser abucheado a lo largo de mi carrera. Esta vez, jugaré cada partido como si estuviéramos lejos de casa ... Todos sabían que quería irme. Lo dije y lo repetí. No quiero entrar en detalles de lo que pasó en las negociaciones. Cada uno sabe lo que hizo durante este periodo. Se pasa la página" sentenció.