El gran objetivo de Leo Messi en este curso era la Champions League. Así lo hizo saber a toda la afición en el trofeo Gamper. El argentino está llevando a su equipo a la final del próximo uno de junio en el Wanda Metropolitano. Antes tienen que sellar el pase en el templo del Liverpool, Anfield.
Con la Liga ya en el bolsillo, al Barça le quedan dos grandes competiciones para levantar. Si se llega a la final de la Champions se encontrará con el Ajax o el Tottenham. Antes, el 25 de mayo, se verán las caras en la final de la Copa del Rey contra el Valencia.
El otro triplete
A nivel individual, Leo Messi aún no ha dicho la última palabra. A falta de tres jornadas de Primera División será indiscutiblemente el máximo goleador. Suma 34 goles en 32 partidos y tiene a sus perseguidores muy lejos. Karim Benzema y Luis Suárez llevan 21 goles empatados en segunda posición.
Leo Messi celebra su segundo gol ante el Liverpool / EFE
Estos buenos registros del argentino le hacen ser el favorito para levantar la Bota de Oro. Su principal rival es Kylian Mbappé que lleva 30 goles. Aunque la Pulga no jugará muchos partidos más en la Liga, tiene el galardón individual a tocar. El francés está sancionado tres partidos por su expulsión en la final de Copa de Francia y solo le quedarían dos encuentros.
Si en la competición regular Messi está en modo apisonadora, también hace lo mismo en Champions. Marcó contra el Olympique de Lyon (2), el Manchester United (2) y el Liverpool (2). En total ya suma 12 goles en nueve partidos. En segundo lugar hay Robert Lewandowski (8), ya eliminado, y Sergio Agüero, Ronaldo, Tadic y Marega (6); también fuera de competición.
A por el Balón de Oro
Si Messi consigue sus objetivos colectivos e individuales, su sexto Balón de Oro estará al caer. Desempataría con Cristiano Ronaldo y se coronaría como el mejor jugador de todos los tiempos. El argentino aún no ha dicho la última palabra, quedan tres partidos -Liverpool, Valencia y Wanda- para volver a hacer historia.