El FC Barcelona ha llegado a finales de abril sin tener el once de gala definido. Hay ocho futbolistas inamovibles salvo lesión: Ter Stegen, Piqué, Lenglet, Jordi Alba, Rakitic, Busquets, Luis Suárez y Leo Messi. Las otras tres posiciones (lateral derecho, interior y extremo izquierdo) se las han alternado seis jugadores a lo largo de la temporada.
En el caso del interior, Arthur ha sido titular en la gran mayoría de encuentros, pero Arturo Vidal lo ha sustituido casi siempre en el minuto 60, por lo que en ciertos encuentros Valverde podría optar por alinear al chileno en detrimento del brasileño. En el carril derecho, la igualdad es máxima, como demostró la eliminatoria ante el Manchester United: Semedo fue titular en Old Trafford y Roberto, en el Camp Nou.
Pero la guerra más dura es la que libran Ousmane Dembelé y Philippe Coutinho en la lucha por acompañar a Messi y Suárez en el frente de ataque. Llegaron ambos tras la salida de Neymar, y ahora se juegan su puesto. Son los dos fichajes más caros en la historia del FC Barcelona y solo hay sitio para uno.
Trayectorias inversas
Para la secretaría técnica eran complementarios, pero Valverde, como en otros aspectos, difería de la opinión de Abidal, Segura y compañía. Los probó juntos durante algunos encuentros, pero con ambos sobre el verde el FC Barcelona perdía equilibrio y compromiso defensivo, dos aspectos imprescindibles para el Txingurri.
Una foto de Coutinho entrando al partido ante la Real Sociedad por Dembelé / EFE
Las trayectorias de Coutinho y Dembelé en el conjunto azulgrana son inversamente proporcionales. En el tramo final de la temporada pasada, el brasileño estuvo brillante y el francés, lesionado. En el inicio del curso actual, el 7 seguía a un gran nivel y el 11 tenía un rendimiento discreto sobre el verde y comportamientos conflictivos fuera de él.
A mediados de campaña, la situación dio un giro de 180 grados. Coutinho empezó a atravesar una enorme crisis de juego y Dembelé empezó a ser el futbolista más desequilibrante del FC Barcelona. Sus caminos se juntaron a principios del mes de enero. El francés cayó lesionado constantemente y el brasileño seguía sin encontrar su mejor versión.
Lucha de titanes
Una situación que se prolongó hasta las últimas semanas. Entonces, el 7 empezó a dar síntomas de mejora, confirmados con su gran gol ante el Manchester United. El 11 inició la fase final de su recuperación, recibió el alta antes de visitar al Manchester United y ha sido titular en los dos últimos partidos de Liga.
Coutinho y Dembelé celebran un gol / EFE
Ahora, llegan las grandes citas: semifinales de Champions, final de Copa y, quién sabe, si la final en el Wanda Metropolitano. Solo podrá jugar uno, y es imposible adivinar quién lo puede hacer. Coutinho ha jugado 32 partidos. Dembelé, 27. El brasileño ayuda a dominar la posesión. El francés, a romper las defensas contrarias. Son dos perfiles muy diferentes, y es probable que ni Valverde sepa quién es el titular ahora mismo.
Tampoco es nada malo. Siempre se ha alabado que haya competitividad en un vestuario como el FC Barcelona. Pero es evidente que dos futbolistas de su talla no pueden convivir por mucho tiempo, y probablemente el que se imponga en este tramo final de temporada será el que se quede el próximo curso. El futuro del otro penderá de un hilo.