Frenkie De Jong tiene una papeleta complicada por resolver. Su futuro está en sus manos, pero cuando todo parecía que el Barça sería su nuevo club, el nuevo rival fuera de los terrenos de juego del club, el PSG, se ha vuelto a entrometer en un fichaje que el club catalán nunca tuvo cerrado, pero sí apalabrado.
Otro caso Griezmann que empieza a escocer en la dirección deportiva del club ante la imposibilidad de hacer frente a los millones del gigante francés, pero que molesta más visto el proyecto deportivo que ofrece la entidad azulgrana. De Jong es admirado por muchos, una perla por descubrir que abandonará el Ajax el próximo verano con destino a un grande. Las recomendaciones públicas avalan su apuesta por el Barça, pero el apartado económico ha cambiado la perspectiva de un jugador que se daba por hecho, sin tener nada firmado todavía.
Fin a la lucha por De Jong
Se acabó. El Barça se planta. Luchará hasta al final por convencer al jugador, pero no habrá cambios en su propuesta deportiva ni económica. O lo toma o lo deja. Sin medias tintas, ni subastas. El interés del club catalán, que debe empezar a pensar en la regeneración de la plantilla, está intacto, pero irrita en exceso que el centrocampista coquetee con otros grandes después de unas negociaciones más que avanzadas y la disposición del club a desembolsar 70 millones de euros por él.
Frenkie de Jong con la camiseta del Ajax / EFE
La competitividad es elevada. PSG, Manchester City o Juventus, todos quieren a un medio que augura una gran proyección, pero en lo deportivo el Barça es insuperable. Una de las mejores ligas europeas, en un club ganador liderado por Leo Messi. ¿Que más quiere? La historia avala su adaptación y rendimiento. Grandes jugadores holandeses han triunfado en el Camp Nou. Koeman, su seleccionador, también ha sido claro: el Barça por encima de todos.
Dinero o títulos
Así podría titularse la última apuesta y baza del FC Barcelona para convencer a De Jong. Su padre y el propio jugador prefieren la liga española, pero la faceta económica no se queda atrás. El club catalán no puede hacer frente a los millones que le ofrece Nasser Al-Khelaïfi. Y con ese condicionante, los títulos deportivos, consideran, deberían sobreponerse a la cuestión económica. El problema, parece ser, reside en su representante. Ali Dursun que por el bien del futbolista y el suyo propio, ha escuchado ofertas de todas las entidades en busca de la mejor prima.
Frenkie De Jong celebra un gol con el Ajax / EFE
Desde el Barça creen firmemente que el jugador debe entender que tan solo tiene 21 años. Si su rendimiento se adapta a las exigencias azulgranas, se podrá hablar en un futuro de un aumento salarial. No hay que olvidar que el Barça es el club que más y mejor paga a sus jugadores, incluso por encima del PSG.
'Caso Neymar'
Y con esos interrogantes sobre la mesa, el club catalán ha usado a Neymar en su propio beneficio. Quiso volar solo, alejado de la sombra de Leo Messi y ni los millones del gigante francés, ni el 10 en la espalda, han sido suficientes para olvidar su etapa en Barcelona. Si Rabiot puede ser un factor también determinante, ya que considera que quizás no tiene sitio para jugar, también debe ser una señal. Por algo no querrá renovar el francés. Frenkie debería ver en el brasileño una advertencia. El proyecto deportivo es sólido y atractivo y con eso debe bastar para persuadir al jugador.